La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, está convencida de que, si finalmente se establece un impuesto a la banca destinado a financiar el sistema público de pensiones, los bancos van a ser "solidarios" entre otras cosas, dijo, "porque los pensionistas" (diez millones actuales, entre los que están en el sistema contributivo más los del asistencial y los de las clases pasivas) "son sus clientes".

La ministra sostuvo que el sistema financiero también debe ser solidario porque el país lo fue "con la banca y con las cajas de ahorros quebradas". Por ambas razones, se mostró "convencida" de que los bancos asumirán el impuesto a la banca para sostener la Seguridad Social y no los repercutirán en los ciudadanos. La ministra señaló, en declaraciones a la cadena Cope, que la ley general de la Seguridad Social ya prevé que se puedan usar impuestos para contribuir a financiar las pensiones, además de la aportación de las propias cotizaciones del sistema.

Valerio anunció también que el Gobierno prepara un plan de lucha contra la explotación laboral, para evitar situaciones de precariedad como el impago de las horas extra y el fraude de los "falsos autónomos".

Mientras, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, descartó ayer que un impuesto a la banca vaya a encarecer el crédito y añadió que este tipo de declaraciones son "un clásico" cuando se plantea algo así, pero que "no tienen sentido". En una entrevista concedida a Canal Sur TV recogida por Europa Press, la ministra indicó que en este sector "hay margen" para una medida en este sentido y aseguró que el sector bancario "aporta menos comparativamente que el resto del sector empresarial" español.