El empresario Ildefonso Rodríguez Iglesias acaba de cerrar un acuerdo para vender la histórica constructora gallega Arias Infraestructuras -antes denominada Arias Hermanos- a dos exdirectivos de la compañía Isolux Corsán, Antonio Aranzadi y Mario Barcenilla. La operación supone que estos dos ejecutivos se queden con el 100% de la firma, al hacerse con el 75% que controlaba Rodríguez Iglesias a través de la empresa Abeirar 2005 y el 25% que se correspondía con autocartera de la constructora. El precio de adquisición, sin embargo, no se ha hecho público.

El acuerdo para la venta ya ha sido comunicado a la plantilla, como publicó ayer el diario web Economía Digital. Arias Infraestructuras cuenta en la actualidad con unos 140 trabajadores, según los datos facilitados a este diario por fuentes próximas a la operación, y es una de las principales adjudicatarias de obra pública en Galicia.

Las mismas fuentes explicaron que la decisión del empresario Rodríguez Iglesias de deshacerse de Arias Infraestructuras -con más de 60 años de actividad en Galicia- responde a que no era un activo estratégico en el futuro del grupo Abeirar 2005, centrado fundamentalmente en actividades industriales y tecnológicas y con unos 400 profesionales en plantilla, la mayoría en Galicia pero con actividad también en el exterior.

La salida del empresario gallego de Arias Infraestructuras se produce justo cuando la empresa había logrado superar la crisis vivida en su anterior etapa como Arias Hermanos. La llegada de Rodríguez Iglesias supuso un vuelco total en positivo para la compañía y la salida de los miembros de la saga familiar fundadora, entre los que está el expresidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), Antón Arias Díaz-Eimil. La junta de accionistas acordó en abril de 2015 cambiar su denominación de Arias Hermanos a Arias Infraestructuras. Uno de sus últimos grandes contratos fue la reforma del estadio de Riazor por más de siete millones.