El Tribunal de Arbitraje del Banco Mundial (Ciadi, por sus siglas en inglés) condena a España a abonar 112 millones de euros al fondo de infraestructuras francés Antin como consecuencia del recorte en la retribución a las energías renovables, según avanza el diario El Mundo.

Se trataría de la tercera condena que obligaría al Estado español a indemnizar a aquellos inversores que se adentraron en el sector energético antes del recorte en las primas a las energías renovables y que ahora exigen ser compensados al entender que se les cambió las reglas de juego a mitad de partido.

La condena del Banco Mundial, eso sí, sería solo la mitad de lo que reclamaba el fondo francés, que cifraba en 218 millones de euros la cantidad que le correspondía por este cambio regulatorio que, a su juicio, deterioró su rentabilidad.