El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, afirmó ayer que el organismo estudia la posibilidad de revisar al alza sus previsiones de crecimiento económico del 2,7% para 2018 y el 2,3% para 2019 por el "impulso fiscal" incorporado en el proyecto presupuestario de este año y el programa de estabilidad remitido a Bruselas, si bien advierte de que hay "riesgos" respecto al cumplimiento del déficit.

Así lo señaló Linde durante su última comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Senado para informar sobre el proyecto presupuestario de 2018, en el que ha destacado que la información más reciente confirmaría el escenario previsto por el organismo en marzo, si bien se podría producir una "ligera revisión al alza" para este año y 2019 por el mayor impulso fiscal incorporado en los PGE y en la actualización del Programa de Estabilidad.

El organismo revisó en marzo sus previsiones de crecimiento de la economía española para el próximo trienio y pronosticó un crecimiento del PIB del 2,7% este año, del 2,3% en 2019 y del 2,1% en 2021.

En cuanto a los precios, indicó que las proyecciones de marzo auguraban un avance del 1,2% para el conjunto del año, que podría ser "superior" por el impacto del repunte del precio del petróleo.

Según Linde, la volatilidad actual en este mercado introduce un "elemento de incertidumbre adicional" sobre la evolución de los precios, mientras que para los componentes estables, excluyendo la energía, espera un repunte "paulatino".

Igualmente, el gobernador del Banco de España alertó de otros riesgos para la economía española. En concreto, sobre el precio del petróleo avisó también de que un aumento adicional del precio del crudo podría afectar en mayor medida a la economía, dada la "alta dependencia" energética de España.