Un total de 11 familias gallegas se declararon en quiebra, mientras que las empresas concursadas descendieron un 27,5% de 69 a 50. De este modo, en global, el descenso de los deudores concursados en la comunidad gallega fue del 36,5% hasta un total de 61, la segunda mayor caída entre comunidades, según los datos que publica este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Por naturaleza jurídica de las compañías, 41 de las empresas eran sociedades de responsabilidad limitada, tres eran sociedades anónimas y tres, personas jurídicas, mientras tres firmas eran de otro tipo.

A nivel estatal fueron 391 las familias que se declararon en concurso de acreedores (suspensión de pagos y quiebras) en el primer trimestre del año ante la imposibilidad de afrontar sus pagos y deudas. La cifra representa un avance del 5,1% en relación al mismo periodo de 2017.

No obstante, las empresas concursadas bajaron un 3,4%, hasta sumar 1.066 procedimientos de quiebra, según la Estadística de Procedimiento Concursal del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicada este miércoles. De este modo, sumando familias y empresas, el número de deudores concursados del primer trimestre se situó en 1.457, cifra un 1,3% inferior a la del mismo periodo de 2017.