El presidente ejecutivo de PSA, Carlos Tavares, cobró 6,7 millones de euros en 2017, gracias al empujón extra de un millón de euros de la mano de la adquisición de Opel. Según un documento divulgado por Agence France-Presse. La remuneración se justifica por el "desarrollo e implementación del plan de recuperación de Opel-Vauxhall", la hoja de ruta con la que prevé sacar a la marca alemana de los números rojos en los que lleva inmersa desde que comenzó el siglo. Este millón de euros se suma 1,3 millones de euros que percibe como remuneración fija, otros 2,4 millones en variables por los buenos resultados de la compañía y otros dos millones que recibió en forma de acciones del Grupo PSA.