La recuperación del crédito, la renovación de la flota pesquera nacional y extranjera y la especialización en naves de alto contenido tecnológico hicieron del 2017 un año casi para enmarcar en el sector gallego de la construcción naval. Los astilleros de las rías de Vigo y Pontevedra se adjudicaron la construcción de 13 buques, el mejor registro desde el año 2008, con un valor de 468 millones de euros, según los datos recopilados por Pequeños y Medianos Astilleros Sociedad de Reconversión (Pymar), que agrupa al grueso de la industria en España. Los nuevos pedidos conllevan casi 2,5 millones de horas de trabajo, prácticamente la mitad (47,2%) de las garantizadas en todo el país. A nivel comunitario esta actividad contractual solo es comparable con la de Polonia (inmersa ahora en su propio tax lease), Italia y Rumanía. Galicia no firmaba tantos pedidos desde antes de la desaparición de MCíes o Factoría Naval de Marín.

El buen balance de la industria lleva en gran medida la impronta de un único astillero, Hijos de J. Barreras. El crucero ultrapremium encargado por The Ritz-Carlton costará en torno a 250 millones de euros. Representa por sí solo un volumen de actividad (medido en compensated gross tonnage, CGT) de 43.200 toneladas CGT y empleará a más de 600 personas hasta finales de 2019. En conjunto, los nuevos contratos firmados por el naval gallego representan más de la mitad de las toneladas CGT de España, con 95.000 (el 52,5% del total). Asimismo, las 13 unidades firmadas en 2017 equivalen a más de un tercio las que se lograron a nivel nacional, que cerró el ejercicio con 37 pedidos. Nodosa se erigió como el astillero más activo, con una cartera de cinco pesqueros para España (Pesca Baqueiro), Alemania y Reino Unido.

Al margen del megacrucero de Barreras, la intensa actividad contractual ha consolidado la especialización de la industria gallega en el segmento de buques de investigación oceanográfica. Construcciones Navales Paulino Freire (Freire Shipyard) construirá sendos buques de estas características para Arabia Saudí (el Taqnia, botado ya en diciembre) y para el Kuwait Institute for Scientific Research (KSR), que se suman al que hará Armón Vigo para la institución sueca Sveriges lantbruksuniversitet (SLU).

Haz click para ampliar el gráfico

En la foto fija que arrojan los datos de Pymar y del Ministerio no figuran los al menos 13 buques asignados a la industria gallega pero pendientes de su entrada en vigor, como el megaarrastrero de Russian Fisheries (Metalships & Docks), los siete pesqueros de Nueva Pescanova (Armón Vigo y Burela), el ferri de Naviera Armas (Barreras) o el oceanográfico para el Royal Belgian Institute of Natural Sciences (Freire). Por primera vez desde el estallido de la crisis del tax lease Galicia se subió al trono nacional en actividad ponderada anual, un indicador que computa el número de botaduras, puestas de quilla y entregas de buques, hitos que reflejan el volumen de actividad de esta industria. La comunidad gallega representa el 31% del total nacional, por encima Asturias (30%) y País Vasco (27%).