El presidente de PSA vuelve a Vigo. Carlos Tavares visitará la factoría de Balaídos el próximo viernes 1 de diciembre, según ha publicado La Tribuna de la Automoción, para supervisar la evolución del proyecto K9, la nueva generación de furgonetas (Peugeot Partner, Citroën Berlingo y Opel Combo) que se empezarán a comercializar a mediados del año que viene. La planta ha acelerado la producción de las preseries hasta las cinco unidades diarias, como apuntó esta semana el director del Polo Industrial Ibérico, Frédérich Puech, en las jornadas FARO Impulsa, en las que participó el número dos del Grupo PSA, Maxime Picat. En la visita, avanzada por FARO, Tavares se desplazará a la factoría lusa de Mangualde, donde, como en Vigo, mantendrá distintos encuentros de trabajo con directivos. "A mediados de año tenemos el lanzamiento de las furgonetas y prepararnos para el V20, sin tiempo para descansar", añadió en el foro Puech.

El patrón de la compañía ha estado ya en Vigo en dos ocasiones. La primera, tras asumir el cargo después del mandato de Philippe Varin, en 2014; la segunda, en mayo del año pasado, cuando anunció la adjudicación para la factoría viguesa del todocamino. Con los nuevos lanzamientos Balaídos recuperará volúmenes de producción de más de medio millón de coches al año, un hito que se alcanzará para 2020.

En mayo de 2016, cuando el grupo francés confirmó la adjudicación al centro, la multinacional estimaba un volumen de producción para Balaídos a partir de 2020 de entre 450.000 y 500.000 unidades de los modelos K9 (los tres vehículos comerciales ligeros que ya comenzaron a fabricarse) y el V20, principalmente. Pero esa cifra fue corregida al alza el pasado octubre, coincidiendo con una visita a Vélizy (Francia) del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el conselleiro de Economía, Francisco Conde. Este repunte de actividad se traducirá, según el mandatario gallego, en la creación de más de 1.500 puestos de trabajo.

El equipo de proyecto del V20 -al frente del cual está el ingeniero vigués Rafael Da Rocha- ya lleva meses trabajando en Francia y en Balaídos para preparar el lanzamiento, que forma parte de un programa de producción "mundial".Conllevará una inversión en Balaídos de 640 millones de euros, de los cuales la mayor partida se destinará a la implantación en el Sistema 1 del centro de la nueva plataforma modular de PSA y su socio Dongfeng, que será compartida por las plantas de Madrid, Kénitra (Marruecos) y Figueruelas (Zaragoza).