Las confederaciones de empresarios de Ourense y Pontevedra han mostrado este lunes su rechazo al borrador de reforma de estatutos en el que avanza la patronal gallega, al tiempo que han cargado contra su presidente, Antón Arias.

Ambas organizaciones, lideradas por José Manuel Pérez Canal y Jorge Cebreiros, respectivamente, atribuyen falsedades a la comunicación pública realizada por la CEG al término del comité ejecutivo. Además, critican que la presidencia avance en esta modificación "sin consenso".

Así, por un lado, la comisión permanente de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) ha rechazado por unanimidad la propuesta de modificación estatutaria planteada por Antón Arias, elaborada, según denuncia, sin su consenso.

Por su parte, la Confederación Empresarial de Ourense (CEO) asegura, a través de una nota de prensa, que "es radical y absolutamente falso" que haya planteado "ninguna exigencia ineludible, como dice la CEG, para apoyar cambios en los estatutos".

Los empresarios pontevedreses niegan que su secretario general haya participado en la elaboración del borrador de estatutos, mientras que los ourensanos afirman que el suyo "participó el pasado mes de mayo en una sola reunión para estudiar el alcance de la modificación de los estatutos de la CEG".

LA PROPUESTA DE OURENSE

En ese encuentro, según Ourense, esta confederación fue "la única organización que aportó un documento de trabajo para estudiar con el resto de organizaciones integrantes de la CEG".

En él proponía, en primer lugar, "que las sectoriales tuviesen, como mínimo, la representación equivalente a la de la confederación provincial que menos votos ostente en todos sus órganos de gobierno, incluyendo el comité ejecutivo, en el que ahora carecen de representación".

En segundo lugar planteó, según explica, "que la presidencia de la CEG tenga un carácter rotatorio por turnos de un año y que las sectoriales cuenten con un representante en la junta de vicepresidentes (lo cual les daría la opción de poder optar a la presidencia rotatoria de la CEG)".

En tercer término, en cuanto al régimen electoral, abogaba por "la limitación de delegación de votos por vocales a dos, de forma que cada vocal presente solo pueda llevar el voto de otros dos ausentes, (actualmente las delegaciones no tienen limitación alguna, lo cual restringe enormemente --según subraya-- la presencia física de los vocales en las asambleas)".

"NI SIQUIERA COMUNICADO"

La confederación ourensana destaca que "después de ese encuentro nunca" ha vuelto a saber "nada referido a esta cuestión". "En septiembre, el secretario general de la CEG envió a las territoriales (y no a las sectoriales) otro documento que ha sido el que finalmente se ha llevado a la reunión de comité ejecutivo", resalta.

En este documento, según reprueba, "se habían llevado a cabo una serie de cambios fundamentales en los estatutos que no fueron consensuados y ni siquiera comunicados con el resto de organizaciones territoriales ni sectoriales".

Entre dichos cambios, alude a la fusión de los dos órganos de gobierno, junta directiva y comité ejecutivo en uno nuevo denominado consejo rector "con menos competencias"; posibilidad de voto por correo ordinario y electrónico "poco transparente y de difícil comprensión"; eliminación de los expresidentes de la junta directiva; supresión de los fines de la confederación en competencias sobre riesgos laborales, "etcétera".

Esta organización provincial añade que "hace unos días" conoció la intención de que tal documento fuese debatido en la reunión de la CEG convocada para este lunes. Y apunta que, "ante tal eventualidad, la CEO envió un escrito al presidente de la CEG mostrando su oposición a ese documento sobre la reforma de los estatutos, al considerar que debe ser sometido a una reflexión más detenida, profunda y participada con las organizaciones provinciales y las sectoriales, al objeto de obtener el mayor consenso posible".

De hecho, la junta directiva de la CEO ya había rechazado en su reunión del día 25, el borrador inicial aportado por el secretario de la CEG. "Ante la imposibilidad de asistir a la reunión del comité ejecutivo, se le comunicó al presidente de la CEG su rechazo al borrador de reforma estatutaria propuesto", incide.

Por último, la confederación empresarial de Ourense entiende que "atribuirle públicamente una posición que es falsa solo puede responder a una inaceptable estrategia de desestabilización intencionada y calculada con el objetivo de romper la posición común del resto de organizaciones que en absoluto comparten la gestión y rumbo que los actuales gestores de la patronal gallega".

PERMANENTE DE LA CEP

Por su parte, la comisión permanente de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) ha rechazado este lunes por unanimidad la propuesta de modificación estatutaria de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) planteada por Antón Arias, elaborada "sin" su consenso.

"Es falso que el borrador remitido desde la CEG la semana pasada seafruto del consenso, ya que la confederación pontevedresa no ha dado su visto bueno en ningún momento ni ha realizado aportaciones", ha asegurado ante los integrantes de la comisión permanente Jorge Cebreiros, presidente de la CEP.

Según destaca esta confederación a través de otro comunicado, Cebreiros subrayó que "es absolutamente falso que el secretario general de Pontevedra haya participado en su redacción, como se ha trasladado".

Entre las razones que han cimentado la resolución unánime de la comisión permanente, la nota destaca "la falta de una adecuada representatividad de la confederación, la drástica pérdida de peso de las organizaciones sectoriales, el total desacuerdo con el modo de elección del presidente por medio de un sistema rotatorio, la no limitación de las delegaciones de voto y la falta de transparencia y claridad al definir la incompatibilidad de cargos por parte tanto del presidente de la CEG como de su secretario general".

"La última reunión del Comité Ejecutivo ha dejado en evidencia la absoluta falta de respeto que el señor Arias tiene, tanto a las organizaciones integradas como a los órganos de Gobierno de la CEG", critican los empresarios pontevedreses.

"ROZA LA ILEGALIDAD"

"Roza la ilegalidad no convocar la junta directiva para debatir temas tan importantes como la ratificación de los nombramientos o sobre los estatutos con la presencia de las sectoriales", ha añadido Cebreiros.

También ha sido unánime la decisión de exigir a Antón Arias sudimisión como presidente de los empresarios gallegos por esta "falta detransparencia" y por haber realizado declaraciones "diametralmente opuestas al consenso del tejido empresarial pontevedrés, sobre las que se le pidió reiteradamente que rectificase, sin que llegase a hacerlo en ningún momento ni en público, ni en privado" --se refiere a sus palabras sobre un referéndum pactado en Cataluña--.

"La CEP apuesta por una CEG con futuro y representativa delempresariado gallego", ha señalado Cebreiros. "Ya hemos trasladado en reiteradas ocasiones que no podemos consentir manifestaciones que vayan en contra de los intereses de nuestras empresas", ha incidido.

En concreto, ha hecho alusión a las declaraciones de Arias sobre una subida salarial general, la derogación de la reforma laboral y su posicionamiento a favor de que se lleve a cabo un referéndum sobre la independencia de Cataluña.

En relación a este último aspecto, la Confederación de Empresarios dePontevedra volvió a proclamar su "total respeto por el orden constitucional y por respaldar cualquier medida que las instituciones del Estado adopten para el restablecimiento de la legalidad".