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Las cuentas de la Seguridad Social en la comunidad

El gasto en pensiones crece en Galicia el triple que los ingresos por cotizaciones

El desembolso para las nóminas de jubilación y viudedad aumentó en 127 millones el último año, mientras que la recaudación de la Seguridad Social solo subió 44 millones

Gráfico: Simón Espinosa

Con un enorme agujero casi imposible de cubrir por el progresivo envejecimiento y el considerable peso que los mayores tienen en el conjunto de la población de Galicia, la recuperación de la economía es el único remedio posible para, al menos, paliar el desequilibrio en la comunidad entre lo que cuestan las pensiones y la recaudación de la Seguridad Social a través de las retenciones a los trabajadores. Las afiliaciones crecen. Y, aunque debería ser lo lógico para asegurar el relevo en el mercado laboral, ni lo hizo durante la mayoría de los años de la doble recesión, ni ahora el incremento de las cotizaciones se traslada con toda la fuerza que sería necesaria a la caja del organismo. Los ingresos sufren la temporalidad, el avance de la contratación por horas y la contención de los salarios, que se resisten a despegar. Las pensiones, mientras tanto, no dejan de subir y su coste en Galicia crece el triple que la aportación de las cotizaciones sociales.

Hasta el pasado julio, las nóminas de jubilados, viudedad, invalidez y orfandad en la comunidad sumaron 4.301,5 millones de euros. La partida crece algo más de un 3% (127 millones), en comparación con los mismos meses del pasado 2016, según el informe territorial publicado por la Seguridad Social.

La aportación de los ocupados y empresas al sistema alcanzó durante ese mismo periodo los 2.042 millones de euros, tras un ascenso de solo 43,7 millones. Un 2,2% por encima de la recaudación entre enero y julio del ejercicio anterior. Como viene ocurriendo desde que España dejó de destruir empleo y el número de afiliados volvió a subir, el alza de los ingresos para la Seguridad Social en Galicia sigue situándose a la cola de las regiones. Solo Extremadura y Asturias, muy parecidas en demografía, registran una evolución peor, del 1,8%. En Castilla y León la subida fue del 2,4%; del 2,7% en País Vasco; y del 2,8% en La Rioja y Cantabria. En lo alto del ranking aparece Baleares, donde la recaudación por cotizaciones se dispara un 6,7%; Canarias, con un 5,2%; y Cataluña, que registra un crecimiento del 4,4%.

La diferencia de Galicia respecto a la media estatal no es tan grande en el caso de la variación del gasto en pensiones. En el conjunto del país aumenta un 3,4%, apenas cuatro décimas más que en la autonomía.

La comunidad arrastra históricamente una de las cuantías más bajas para los trabajadores que se jubilan, a pesar de que la pensión media sube -un 12% desde 2011, hasta rondar los 880 euros al mes- por la mayor base de cotización de los nuevos retirados y el fallecimiento de aquellos que pagaron el viejo régimen del campo, "la agraria", con cuotas muy pequeñas.

Con sueldos también más altos y, por tanto, pensiones mayores, Pontevedra y A Coruña tiran del ascenso del gasto para la Seguridad Social, con alzas en el último año del 3,4% y el 3,2%, respectivamente, mientras que en Ourense es del 2,5% y el 1,9% en Lugo.

Ya con los datos de agosto conocidos hace unos días, Galicia roza el millón de afiliados y vuelve a los niveles de 2011. En comparación con el verano pasado, el incremento es de 19.124. De ellos, unos 3.500 son trabajadores de la industria manufacturera; por encima de 2.600 estaban en actividades sanitarias y servicios sociales; más de 2.500 en la hostelería, uno de los sectores con más peso del empleo en general en la comunidad y, sobre todo, en la temporada estival; otros 2.200 fueron altas en actividades profesionales, científicas y técnicas; y más de 1.900 en tareas administrativas y servicios auxiliares.

Las caídas se concentran en los empleados domésticos (3 menos), sector energético (41), finanzas y seguros (72) y agricultura, ganadería, silvicultura y pesca (935).

Sindicatos y patronal retoman el diálogo sobre la negociación colectiva

  • Los agentes sociales retomarán el próximo 18 de septiembre el diálogo en el marco de la comisión de seguimiento del III Acuerdo Interconfederal para la Negociación Colectiva (AENC) 2015-2017 con la intención de acercar posturas para llegar a un nuevo acuerdo de cara a los próximos años. Pese a que aún no hay temas ni planteamientos encima de la mesa, tanto sindicatos como empresarios coinciden en la "urgencia" del asunto y la conveniencia de analizar el estado actual de la negociación de convenios y sondear las perspectivas y posibilidades de avanzar de "manera consensuada" en la definición de un nuevo marco de referencia compartido para los próximos años, según aseguran fuentes consultadas por Europa Press. El actual acuerdo, con vigencia para el periodo 2015-2017, caducará el próximo 31 de enero. La reunión para renovar el III AENC se celebrará después de que en el pasado mes de julio los agentes sociales diesen "por muerta" la negociación del acuerdo de salarios para 2017. Patronal y sindicatos no lograron acordar una banda salarial que sirviese de referencia para firmar los convenios sectoriales y de empresa para este año. En la actualidad, la mayoría de las negociaciones se están cerrando con subidas del 1,3% de media. Los sindicatos, que pedían subidas entre el 1,8% y el 3% y la patronal aseguró que fueron las organizaciones salariales las que hicieron "inalcanzable" el pacto salarial para este año.

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