Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), transmitió ayer, en una reunión en la que acordó mantener los tipo de interes en el 0%, la primera señal de que la entidad medita la estrategia de repliegue del programa de compra de 60.000 millones de euros al mes de deuda pública y privada con el que busca reanimar la inflación y el crecimiento económico. "En otoño, probablemente" se tomarán decisiones, afirmó el banquero. Un mensaje que impulsó un 1% al euro y lo afianzó por encima de los 1,20 dólares, consolidando una posición que preocupa al propio BCE por su impacto en el crecimiento y en el objetivo de inflación. "Estaremos vigilantes", comentó Draghi sobre esa cuestión.