La película Total Recall vio la luz en 1990 y la mayoría de la futurista tecnología que en ella aparecía se antojaba como una quimera difícil de alcanzar por el ser humano. Entre las escenas del filme, protagonizado por Arnold Schwarzenegger, se halla una en la que un taxi sin conductor (sustituido por un robot que interactúa con lo pasajeros) circula de forma autónoma. Lo que parecía imposible de conseguir, hoy está a la orden del día. Si el Grupo PSA ya ha probado coches autónomos desde finales de 2015 por Vigo, la intención que persigue la conocida Tesla no se queda atrás: la firma de Elon Musk quiere probar por carreteras estadounidenses su camión eléctrico capaz de conducir por sí solo.

La firma del también responsable de SpaceX o The Boring Company se reunió con funcionarios del departamento de transporte del estado de Nevada el pasado mes. Allí, expusieron sus planes para llevar a cabo estas pruebas, tal y como publicó la agencia Reuters.

Aunque la información por el momento es escasa, el pasado miércoles miembros de Tesla también se reunieron con funcionarios del Departamento de Vehículos a Motor (DMV, en inglés) de California, con lo que la intención sería la de hacer circular al camión entre los dos estados, como recoge el medio estadounidense USA Today, citando como fuente a la portavoz del departamento, Jessica Gonzalez.

Entre los correos cruzados con Tesla, la DMV recordó que por el momento este tipo de pruebas no se pueden hacer en California, indica que los test se harían en un pelotón de camiones, es decir, detrás de un vehículo que les marcaría tanto la trayectoria como la velocidad.

El responsable de regulación de Tesla, Nasser Zamanide, escribió al DMV de Nevada que el "objetivo principal es la capacidad de operar nuestros prototipos de camiones de prueba de manera continua a través de la línea estatal y dentro de los estados de Nevada y California en un modo autónomo y sin tener a una persona dentro del vehículo".

Como no podía ser de otra manera, las redes sociales se incendiaron con la información de Reuters y la posibilidad de que la firma lleve a cabo estas pruebas. Y es que por el momento, poco o nada se sabe de este camión eléctrico que planea sacara Tesla. El propio Musk escribió en un tuit que su presentación tendría lugar en septiembre y, por el momento, no ha trascendido ni tan siquiera una imagen del vehículo.

Todo esto mientras sus principales competidores en esta carrera por un camión autónomo, Alphabet y Uber (a través de su compañía Otto), están inmersos en un lío judicial en el que el primero acusa al segundo de robar algunas de sus tecnologías clave.

Tesla sigue, de esta forma, ganando adeptos en el mundo de la tecnología con sus atrevidas propuestas, que también dejan en vilo a los principales constructores mundiales. Mientras, todavía está en el aire la fábrica de baterías que la firma prevé construir en Europa, para la que Galicia puja fuerte.