La puesta en marcha de la tarifa plana de 50 euros para nuevos autónomos en el año 2013 cumplió una de las mayores reivindicaciones que venía haciendo el sector: relajar la presión con la que aprietan las cotizaciones a la Seguridad Social durante los primeros meses de actividad. Desde entonces, un total de 65.242 autónomos gallegos (tres de cada diez existentes) han disfrutado de esta tarifa plana de 50 euros mensuales durante los seis primeros meses, frente a los 275 euros a los que se sitúa la cuota mínima desde el pasado mes de julio y a la que, según datos publicados ayer por la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) se acogen el 86,4% de los trabajadores. En toda España disfrutan del plan 1,2 millones de trabajadores.

No obstante, la proporción de autónomos de la comunidad que se han acogido a esta tarifa plana es la quinta más reducida de todo el país -tan solo por detrás de País Vasco, Castilla y León, La Rioja y Cantabria, en donde el porcentaje va desde el 26,2% de la primera hasta el 27,8% de la última- y siete puntos inferior a la media nacional, instalada en el 37,5%. Esta tendencia tiene su explicación por el frenazo que ha sufrido el número de autónomos en los últimos años en Galicia, cuyo protagonismo como palanca de empleo ha sido menor que en el resto de España. Desde julio del 2013, hace cuatro años, la lista de autónomos en la comunidad aumentó en 993 personas (un 0,5%), un repunte que solo supera a Asturias (0,26%) y a País Vasco (-0,13%), y que contrasta con el fuerte rebote del 6% del resto del país. Lisardo Domínguez, portavoz de Autónomos de Galicia (AUGA), lo explica por el "envejecimiento de la población y la mayor edad media de los autónomos en Galicia", que provoca que las nuevas altas en el sistema apenas sirvan para suplir las bajas por jubilación que se producen.

La menor incorporación de autónomos en Galicia es una de las cuestiones que han pesado sobre el número de trabajadores que han podido acogerse a la tarifa plana de 50 euros. La razón se encuentra en la escasa incorporación de nuevos autónomos en la comunidad, el colectivo al que se encontraba dirigida esta medida que tenía como principal requisito no haber estar dado de alta como autónomo en los últimos cinco años.

Se ampliará a partir de enero

Hasta ahora, la medida permitía que la cuota que debe pagar el autónomo a la Seguridad Social se redujese hasta los 50 euros mensuales durante los seis primeros meses de su andadura, frente a los 275 euros a los que ascendería la cotización por la base mínima sin esta bonificación. Pasados esos seis meses, la cuota se hasta los 137,5 euros en el segundo semestre y hasta los 192,5 euros mensuales los seis meses posteriores (con la posibilidad de ampliarse a 18 en el caso de hombres menores de 30 años o mujeres que no superen los 35 años de edad).

Sin embargo, la nueva medida aprobada por el Congreso permitirá prolongar el periodo de aplicación de la tarifa de 50 euros hasta que se cumplan doce meses del inicio de la actividad. Además, el requisito de no haber registrado actividad en los últimos cinco años se reduce a dos. Sin embargo, en el sector reclaman más medidas para hacer frente a "una carga impositiva muy elevada", reclama Domínguez, que denuncia la falta de apoyo que recibe el sector y reclama una ampliación de la tarifa plana de 50 euros en otros seis meses adicionales, hasta los 18 meses (año y medio).