El ritmo de destrucción de empleo público en Galicia en el último lustro casi triplica a la media del resto de España. Desde que el número de funcionarios en la comunidad alcanzase máximos históricos en el primer trimestre del año 2012, cuando la cifra ascendió a los 204.900 trabajadores, ha ido reduciéndose paulatinamente hasta los 173.900 actuales, lo que representa un descenso del 15,1% en apenas cinco años.
De este modo, el descenso en el número de funcionarios que ha experimentado Galicia es un 232% superior a la que ha tenido lugar en el resto del país. Si se excluye el dato gallego, el número de empleados públicos en España se sitúa en los 2,79 millones de personas, apenas un 6,5% por debajo de los niveles a los que se situaba en el primer trimestre del año 2012.
La rebaja de las tasas de reposición hasta niveles cercanos al 0% en determinados sectores, unido al envejecimiento de los empleados públicos, han generado el caldo de cultivo para esta fuerte reducción. El sector público no ha sido ajeno a la tendencia demográfica que atraviesa la comunidad y el 28,8% de los funcionarios gallegos son mayores de 55 años, una cifra que se sitúa casi cuatro puntos por encima de la media del resto de España, que ronda el 25%. El envejecimiento de los trabajadores públicos se hace patente si se observa que la proporción de aquellos con edad superior a los 55 años sobre el total se ha disparado en casi 12 puntos porcentuales, desde el 16,9% que presentaba en el tercer trimestre del año 2009. De hecho, es el único grupo de edad en el que aumenta el número de trabajadores (ha pasado de 33.600 en el tercer trimestre de 2009 a los 50.100 actuales).
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Además, Galicia se desmarca de la tendencia que ha registrado el resto de España en los últimos años. Entre el cuarto trimestre del año 2013, cuando el empleo público en España retrocedió a niveles del 2006, y el primer trimestre de este año, el número de asalariados en plantilla de la Administración ha escalado un 2,6% en España, frente al 3,9% que retrocede en Galicia.
De hecho, mientras que a nivel nacional el empleo público encuentra a un 11,2% regresar a sus máximos históricos de 3,31 millones de trabajadores, en Galicia todavía habría que añadir a 31.000 más, lo que representa un 17,8%.
Galicia destruye empleo público a mayor ritmo que el resto de España, pero su peso sobre el conjunto de trabajadores de la comunidad es todavía superior a la media nacional. Según los últimos datos relativos al primer trimestre del año, los asalariados a cargo de la Administración suponen el 16,8% del total de trabajadores.
Este porcentaje es un punto superior al que se registraba al cierre del cuarto trimestre de 2008 -cuando el PIB español registró su primer retroceso interanual, del 1,3%- ya que su caída ha sido inferior a la experimentada por el sector privado, y supera en siete décimas a la media del conjunto de España, que actualmente se sitúa en el 16,1%, 1,4 puntos porcentuales por encima del 14,7% que registraba hace exactamente una década.
En este apartado, las comunidades de Extremadura y Cataluña marcan los dos extremos. En la primera, uno de cada cuatro trabajadores (el 26,7%) está en plantilla de la Administración, lo que representa el dato más elevado de todo el territorio nacional -Castilla-La Mancha es la segunda, con un 19,9%-. En Cataluña, por el contrario, el empleo público apenas supone el 12,4% del total. En la tabla le precede Comunidad Valenciana, en donde el peso de los trabajadores públicos supone el 13% sobre del total.
Ourense encabeza la tabla
Dentro de la comunidad, tan solo en la provincia de Pontevedra el peso del empleo público sobre el total se sitúa por debajo de la media nacional. Se sitúa en el 13,1%, un dato que contrasta con el 20,7% de Ourense, que registra la mayor proporción de funcionarios de las cuatro provincias gallegas. En A Coruña, el 19% del total de empleados son funcionarios, mientras que en Lugo este porcentaje se reduce hasta el 16,1%, en línea con la media nacional.
La comunidad ofertará 3.000 plazas este año
- El número total de funcionarios en España se eleva un 1,8% desde los mínimos de 2,92 millones de personas marcados en el primer trimestre de 2014 y todo parece indicar que esta tendencia al alza se mantendrá de cara a los próximos años. El ministerio de Hacienda dio luz verde el pasado mes de junio el ministerio de Hacienda para sacar adelante una Oferta Público de Empleo que se prevé que engrose la lista de asalariados públicos en 67.000 personas. Hasta el momento está confirmada la convocatoria de 28.249 nuevas plazas por parte de la Administración General del Estado, la mayor desde el año 2008, y se prevé que la cifra se sitúe ligeramente por encima de los 67.000 nuevos puestos que avanza el Ministerio de Hacienda a finales del mes de marzo. La razón está en que las 28.249 plazas ofertadas por la Administración General del Estado superan a las 19.000 inicialmente previstas. De las 28.144 plazas inicialmente previstas para las Comunidades Autónomas, la Xunta prevé que más de 3.000 correspondan a Galicia. De momento ya está confirmada la convocatoria de 1.043 nuevas plazas para el sector de la educación (de los cuales 540 serán profesores de ESO y 400, maestros) a las que en el último trimestre del año se espera que se sumen los cerca de 1.600 puestos que se ofertarán para aumentar el número de trabajadores de la sanidad pública. Sube la tasa de reposición Además, el acuerdo firmado entre el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y las organizaciones sindicales CC OO, UGT y CSI-F, también incluye elevar la tasa de reposición al 100% en sectores como sanidad, educación, justicia, lucha contra el fraude fiscal, prevención y extinción de incendios o políticas activas de empleo. En el resto se mantendrá la tasa en el 50%. Además, se calcula que unos 260.000 trabajadores interinos pasen a ser fijos en los tres próximos años, lo que reducirá la tasa de temporalidad hasta el 8%.
