La bombona de butano es desde hoy un 5% más cara que ayer y un 32% más que hace justo un año. De esta forma, quedará prácticamente absorbido el déficit que acarrea esta actividad en los últimos bimestres, según recoge una resolución de la Dirección General de Política Energética y que publica el Boletín Oficial de Estado (BOE).

Después de esta revisión, el precio máximo de la bombona una vez incluidos los impuestos se situará en los 14,88 euros. Son 3,61 más que en julio del año pasado cuando comenzó su escalada. Paradójicamente, este nuevo encarecimiento se produce a pesar de que el precio de la materia prima se ha abaratado. El Gobierno justifica el incremento por la necesidad de acabar con el déficit que acumula el butano.

De hecho, para fijar este precio no solo se tiene en cuenta la cotización de la materia prima, también depende del precio del transporte y de los tipos de cambio. Todo esto ha provocado un nuevo alza de la bombona de butano que ha indignado a las organizaciones de consumidores. Facua ha pedido al Gobierno que establezca otros instrumentos de cálculo en la revisión de estas tarifas con el objetivo de "proteger los intereses económicos de los consumidores y evitar precios excesivos".

Aún así, la bombona de butano está aún lejos de su récord. Según apunta Facua el máximo histórico fueron los 17,5 euros que se alcanzaron el 14 de mayo de 2013. Un precio que estuvo vigente hasta el 21 de marzo de 2015, es decir, durante 672 días.

El incremento contrasta con la evolución de otros productos similares. Así, la tarifa de último recurso (TUR) del gas natural bajó este mes en torno a un 1%, debido, principalmente, al descenso de la cotización del petróleo Brent. Mientras que el gas licuado de petróleo (GLP) por canalización se abarató un 5,5%.