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El negocio de la reparación naval en la ría de Vigo cae a la mitad

El sector emplea una media de 800 trabajadores, frente a los más de 1.600 que tenía en 2007

Las actividades de reparación y transformación naval en la ría de Vigo han caído a la mitad en los últimos diez años, con una media de 800 trabajadores, frente a los más de 1.600 que había hace una década, según los datos que maneja el propio sector. La crisis económica, que hizo que los armadores demorasen los trabajo a bordo, así como la irrupción de nuevos competidores en esta industria, como el puerto de Tenerife, entre otros, han mermado un negocio que en Vigo se concentra en el muelle de reparaciones de Bouzas y en astilleros como MetalShips & Docks, Freire, Cardama, Armada y Nodosa (Marín).

La industria auxiliar, representada por Asime, teme una pérdida de capacidad para realizar reparaciones navales en Vigo y su área por este lento declive. Este segmento de industria naval, en la que los astilleros y auxiliares gallegas tienen una dilatada experiencia, no ha sabido aprovechar al máximo el potencial que supone el tránsito de más de 24.000 buques al año frente a las costas gallegas, algo que sí han hecho por ejemplo en Las Palmas (Astican se encuentra a pleno rendimiento pese a la crisis offshore) y Tenerife, una de las terminales en las que la reparación de buques y plataformas más ha crecido en los últimos años.

Ante esta situación, la industria auxiliar hace un llamamiento a que no se reduzca la capacidad física en el Puerto vigués para desarrollar este tipo de trabajos, restringida prácticamente al muelle de reparaciones de Bouzas, y que los astilleros con experiencia en este sector lo potencien. Fuentes del sector explican que al igual que Las Palmas o Tenerife, la ría de Vigo tiene "potencial" para convertirse en un polo de reparación de plataformas de crudo y gas (en Tenerife generan un negocio anual de más de 70 millones de euros).

Hace diez años, en pleno apogeo de la construcción naval, un grupo de más de medio centenar de empresas auxiliares puso en marcha la sociedad Centro de Reparaciones Navales de Vigo con el objetivo de impulsar esta actividad (menos condicionada a los ciclos económicos como la construcción de buques), que en sus orígenes se había interesado incluso por comprar las instalaciones de MetalShips en Ríos (Teis) para crear un gran polo de reparación y transformación naval, operación que no cuajó. Esta sociedad, todavía activa, pero con menos socios, sigue promocionando la actividad de reparación y transformación en la ría y hace dos años volvió a pujar por las instalaciones de la extinta Factoría Naval de Marín (hoy Nodosa) para crear ese gran polo, sin éxito.

Uno de los problemas a los que se enfrentan las auxiliares y astilleros que hacen reparación naval es el intrusismo laboral que existe en el sector por parte de particulares y "entidades" no autorizadas para este tipo de actividades, y que incumplen las normas de prevención de riesgos y salud laboral y medioambiental, como avanzó FARO (ver edición del 11 de diciembre).

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