Fuerte pinchazo de las ventas de turismos y todoterrenos en abril en Galicia. Las entregas de coches cayeron un 16,5% ese mes, hasta las 3.042 unidades, por la desaceleración del mercado automovilístico a consecuencia de la falta de un nuevo plan de ayudas a la compra y por el efecto Semana Santa, que redujo el número de días laborables del mes (en 2016 las festividades cayeron en marzo). El dato de abril también ha llevado a negativo el balance acumulado del año: en los primeros cuatro meses de 2017, las matriculaciones se redujeron el 0,1%, con 13.347 unidades.
Los datos facilitados por las patronales del sector, Anfac (fabricantes), Faconauto (concesionarios) y Ganvam (vendedores e importadores), reflejan el derrumbe en el canal de particulares frente al repunte de las empresas alquiladoras por las vacaciones de Semana Santa. En general, las entregas de turismos y todoterrenos subieron a nivel nacional solo un 1,1% en abril, hasta las 101.375 unidades. Galicia ha sido la comunidad con mayor descenso de ventas (-16,5%), solo superada por las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Madrid, Comunidad Valenciana y Baleares fueron las únicas cerraron en positivo.
Entre las provincias gallegas, las mayores caídas se registraron en Lugo (-25,2%) y A Coruña (-18,2%), seguidas por Pontevedra (-13,22%) y Ourense (-9,31%). La herculina generó en cambio el mayor número de operaciones, con 1.263 matriculaciones, seguida por Pontevedra, con 1.050. Si se analizan los cuatro primeros meses, solo Pontevedra (+,043%) y Lugo (+4,21%) elevaron sus ventas de turismos y todoterrenos con respecto al mismo periodo de 2016, al contrario que A Coruña (-1,2%) y Ourense (-2,1%).
Las asociaciones consideran que el "estancamiento" se debe en buena parte a la celebración de la Semana Santa de este año en abril, lo que contrasta con el calendario de 2016, en el que las festividades cayeron en marzo. Durante el mes, el mercado de vehículos particulares sufrió una caída del 14%, lo que contrasta con el comportamiento del de alquiladores, en el que se produjo un incremento del 35,8%.
Si se desestacionaliza la Semana Santa y se compara el bimestre comprendido entre marzo y abril de este año con el anterior, el incremento en el conjunto es del 7,2%, hasta 226.975 unidades. En todo caso, Anfac, Faconauto y Ganvam advierten de que las matriculaciones de particulares seguirían mostrando, en todo caso, una tendencia negativa, al registrar una caída del 1,4%, hasta 101.384 unidades.
El sector sigue a la espera de que el Gobierno ponga en marcha una nueva edición del PIVE para reactivar las ventas en el segmento de particulares. El Ejecutivo ha reservado casi 70 millones de euros en los nuevos Presupuestos Generales del Estado para estimular la compra de vehículos: 50 millones con destino al Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía para una nueva edición del PIVE que será más exigente en materia de emisiones contaminantes, y otra de 16,6 millones para reeditar el Plan Movea de incentivos a la compra de coches de energías alternativas.
