Los presidentes de la patronal de Pontevedra y Ourense, Jorge Cebreiros y José Manuel Pérez Canal, lamentaron ayer que la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), que preside el coruñés Antón Arias, siga sin nombrar ni ratificar en el cargo al secretario general en funciones y tampoco se hayan dado pasos para resolver la complicada situación económica que atraviesa la entidad.

Tras el comité ejecutivo y junta directiva de la CEG celebrada esta mañana, los titulares de la patronal pontevedresa y ourensana salieron compañados de los exresponsables de la CEG Antonio Dieter Moure (Ourense) y José Manuel Fernández Alvariño (Pontevedra). Éste último explicó que volvió a reiterar a Antón Arias "que se apartara" de la Presidencia de la patronal y dejara paso a "una gestora compuesta por los cuatro presidentes provinciales".

Pérez Canal dejó claro que se mantiene la división en el seno de la Confederación de Empresarios de Galicia, a lo que Cebreiros apostilló que si acudieron a esta cita fue porque se debatían asuntos de interés para las provincias de Ourense y Pontevedra. Así, explicó que analizaron las propuestas de la CEG a la Cumbre Ibérica, que celebrarán los Gobiernos de España y Portugal, el 29 y 30 de mayo, o el acuerdo interprofesional de negociación colectiva.

"Pero el problema es que no se nos tiene en cuenta. No se habla de movilidad transfronteriza, de las distintas legislaciones a uno y otro lado de la frontera, así como tampoco se ha hablado del AVE a Vigo por Cerdedo ni del tráfico ferroviario de mercancías entre Galicia y el Norte de Portugal", lamentó Cebreiros.

Pero lo más "preocupante", a su juicio, es el informe presentado por el presidente de la CEG sobre la situación económica de la patronal. "No se ha avanzado nada con la firma de la hipoteca", lamenta el responsable de los empresarios pontevedreses. Este préstamo, que se concede sobre la sede de la Confederación de Empresarios, es, según explicó, la única solución que hay sobre la mesa a los números rojos de la entidad.

"Pero nos preocupa más los impagos y la responsabilidad sobre terceros", añadió Cebreiros. Por esa razón, Alvariño apostilló que es necesario "apartar" al actual presidente y nombrar una gestora que "arregle el tema del crédito".

Por su parte, Pérez Canal se mostró molesto por el hecho de que todavía no se haya nombrado secretario general de la CEG, que ahora mismo ocupa en funciones el lucense Jaime López, y reiteró que "no puede haber unidad" cuando Antón Arias rompió el pacto existente entre las cuatro confederaciones provinciales y optó al cargo de presidente. "Es legal pero yo siento que no está legitimado", censuró Alvariño.