El secretario de Estado de Presupuestos y Gastos, Alberto Nadal, abogó ayer por mantener la política económica de los últimos años para seguir ganando "credibilidad y confianza" y contribuir a que España presente un déficit "prácticamente inexistente" en "dos o tres años", al tiempo abrió la puerta a que el Gobierno pueda "tocar figuras impositivas con especial impacto en el crecimiento". Así lo señaló Nadal durante su intervención en el Fórum Europa, organizado por Nueva Economía Fórum, en el que defendió que si el Ejecutivo continúa con la política económica de los últimos ejercicios, España seguirá "ganando credibilidad, reduciendo la prima de riesgo y ganando confianza en los mercados internacionales".

Nadal subrayó que si se mantienen las mismas directrices económicas de los últimos años, la creación de empleo se mantendrá en "ritmos elevados", de unos 500.000 puestos de trabajo al año, lo que supondrá un "desahogo" para el sistema de la Seguridad Social. De esta forma, aseguró que "se pueden tocar figuras impositivas con especial impacto en el crecimiento, mejorar las políticas de innovación e inversión" y dar a la economía "el mayor plazo de estabilidad del que ha tenido en sus historia". Nadal cuestionó las críticas al Gobierno respecto a la senda de reducción del déficit, ya que en su opinión ha sido una senda "moderada" y "adecuada", porque ha permitido reducir el desajuste entre gastos e ingresos a la vez que ganar credibilidad y mantener la "cohesión social" y el gasto en infraestructuras básicas.

"Se encarrila, se mantiene una senda firma, de casi un punto, que ha situado el déficit en el 4,3% en 2016", enfatizó Nadal, quien insistió en que este año se alcanzará el objetivo de déficit del 3,1%, en 2018 España saldrá del procedimiento de déficit excesivo y dos años más tarde "no habrá déficit público en España".

Cumplimiento

En este sentido, la oficina estadística de la Unión Europea (UE), Eurostat, confirmó también ayer que España cumplió su objetivo de déficit para 2016, pues el indicador se situó en el 4,5 % del producto interior bruto (PIB) al cierre del año pasado, una décima por debajo del límite pactado con Bruselas. En cuanto a la deuda pública española, Eurostat certificó que al concluir 2016 se situó en el 99,4 %, tal y como había anticipado a finales del mes pasado el Banco de España. En su primera estimación preliminar, realizada a partir de los datos proporcionados por los Estados miembros, la oficina de estadística comunitaria constató que España tuvo el porcentaje de déficit más elevado de todos los países del club comunitario.