El centro tecnológico Aimen y las firmas Nodosafer, Russula y Celsa Atlantic forman el consorcio TinTin que, con un presupuesto de 3,3 millones de euros, busca desarrollar nuevas herramientas y tecnologías de bajo coste para controlar y reconfigurar de forma rápida y autónoma sistemas de fabricación de laminación de productos en caliente para la industria siderúrgica. El proyecto, enmarcado en el Programa Feder-Innterconecta, aplicarán tecnologías como visión artificial y robótica, con las que su intención es "flexibilizar las líneas de laminación, fabricar nuevos productos y formatos de acero corrugado y alambrón".