La multinacional automovilística francesa Grupo PSA aumentó un 4,2% sus ventas en el primer trimestre del año pese al descalabro sufrido por sus tres marcas (Peugeot, Citroën y DS) en la región China-Sudeste asiático, según datos estimados a los que ha tenido acceso FARO. En total, las entregas mundiales del consorcio se elevaron hasta las 729.000 unidades, frente a las 699.000 del mismo periodo del año pasado.

El balance trimestral muestra un comportamiento muy dispar entre mercados y marcas. Así, en China y Sudeste asiático las ventas se desplomaron un 45,6% entre enero y marzo, con 83.000 unidades, un dato inaceptable para el presidente de PSA, Carlos Tavares, que ya ha ordenado un plan de contención de costes y de mejora de la distribución en China, uno de los mercados con mayor potencial de crecimiento. En Europa, por contra, PSA cerró marzo con unas ventas estables (465.000 unidades, un 0,1% más), al igual que en Latinoamérica (-1,5%).

El mejor comportamiento se registró en la región África-Oriente Medio, encabezada por Irán. PSA disparó casi el 300% sus entregas, pasando de las 32.000 unidades a las 132.800, según datos estimados. También en Eurasia se han disparado las ventas (31,2%), aunque en volumen apenas se alcanzaron unas 2.900 unidades. Por marcas, a nivel mundial Peugeot es la que tira del carro, con un crecimiento del 18%, mientras que Citroën bajó un 11,9% y DS mantiene su mala racha: -44,4%.