El turismo batió en Galicia todos los récords este año y eso se notó en el mercado laboral con un aumento del número de ocupados en 23.900 personas, un 2,3% más, lo que significa que la comunidad creó 265 empleos cada día de los meses de julio, agosto y septiembre, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), que ayer publicaron el Instituto Nacional de Estadística (INE) y su homólogo gallego, el IGE, y que sitúan a la gallega como la cuarta comunidad en la que más creció la ocupación. Al finalizar septiembre Galicia tenía 1.057.900 ocupados, la cifra más alta registrada desde diciembre de 2011, cuando tocó los 1.084.400. El número de parados no descendió tanto, con 16.200 desempleados menos que al finalizar del pasado mes de junio (un 7,25%), pero lo suficiente para alcanzar el dato más bajo desde diciembre de 2010 (203.000 personas). Es además el sexto mejor por comunidades.
Los datos gallegos del verano son mejores que en el conjunto de España, que redujo el paro un 5,5%, en 253.900 personas, hasta sumar 4.320.800 desempleados. La ocupación se incrementó un 1,24%, en 226.500, hasta las 18.527.500 personas. Pero la evolución anual de la comunidad es peor que la media (-11% de paro y +2,6% de ocupación), lo evidencia que mucho del empleo que se creó en verano aquí se destruirá en temporada baja, como ayer se encargaron de destacar los tres sindicatos.
La caída trimestral del desempleo en Galicia es de hecho ligeramente superior a la registrada en el último año (16.100 empleos, -7,22%). La diferencia es considerablemente superior en el caso de la ocupación; creció bastante más que desde septiembre de 2015 (18.900). Si Galicia creó 265 empleos cada día de verano, en cada uno del último año fueron 52. La tasa de paro gallega se reduce en punto y medio respecto a hace tres meses y hace un año, hasta el 16,3%, frente al 18,9% estatal.
Para UGT, empleo, precariedad y temporalidad van de la mano y destaca que 72.100 hogares gallegos tienen a todos sus miembros en paro (casi 5.000 menos que hace un año). CCOO subraya que el 45% de los parados gallegos llevan sin trabajo desde hace dos o más años y demanda un plan de empleo para crear puestos estables. La CIG denuncia que es el sector servicios el que tira de la ocupación con contratos estacionales. No le falta razón. La tasa de temporalidad aumentó un punto y medio en el tercer trimestre, hasta el 27,4%. Además, el 71% de los ocupados gallegos lo está en el sector servicios, una cifra que aumentó en medio punto desde 2010 (66%). Son 746.300 gallegos, 10.000 más que en junio y 9.000 más que un año atrás. El segundo mayor aumento se produce en la industria, con 8.200 ocupados más que en junio y 2.200 más que en septiembre de 2015. De hecho el nivel de ocupación de la industria crece un poco desde 2010 (del 15 al 16%); el del sector primario descendió del 8,2% al 6,9% y el de la construcción -sin cambios en esta EPA- pasó del 9,5% al 6,8%.
El 68% de la caída del paro en el tercer trimestre se produjo en Pontevedra, con 11.100 desempleados menos (-12%). Fue del 13% en comparación con un año atrás (-11.800 desocupados menos), lo que rebaja su total a 78.600 personas sin trabajo y sitúa a A Coruña como líder gallega en desempleo. La provincia apenas redujo su paro un 2,4% en el trimestre (800 personas); un 3,5% (3.000) en el último año y suma 82.600 desempleados. Lugo dobló esa mejora en verano (-1.500 personas , un 6,4%) y Ourense la triplicó (-3.300, un 12%).
La tasa de paro entre los jóvenes gallegos descendió desde el verano en 5,6 puntos hasta el 27,9%, gracias al incremento de los activos en 4.600 personas y la ocupación en 12.800. Los datos trimestrales contrastan con la pérdida de población de entre 16 y 29 años registrada en el último año, 9.000 personas, lo que hace que Galicia perdiese 3.600 activos en esta edad, pero también 9.100 parados, 1.600 inactivos y 1.300 ocupados.
