El consejero delegado de BBVA, Carlos Torres, avanzó ayer que la entidad prevé cerrar 100 oficinas y un recorte de plantilla de unos 500 empleados al cierre de este año en España, que se sumarían al ajuste por la integración de Catalunya Banc (CX). De esta forma, el banco prevé un total de 2.000 salidas a cierre de este ejercicio. La entidad obtuvo un beneficio neto atribuido de 2.797 millones de euros hasta septiembre de 2016, un 64,3% más que un año antes.

Torres calificó de "éxito" la integración de Catalunya Caixa (CX), que el banco completó en septiembre tras cerrar 436 oficinas y un ajuste de plantilla de 1.556 trabajadores relacionadas con dicho proceso. Dentro del esfuerzo "continuo" de BBVA por controlar los costes, el consejero delegado del banco explicó que las salidas adicionales al ERE de CX se deben a la "gestión ordinaria" y que éstas se articularán sobre todo vía prejubilaciones. Para ello, BBVA ha dotado 53 millones de euros en provisiones por costes asociados a este ajuste de trabajadores y a la reestructuración, que afectará a personal relacionado con la actividad bancaria en España.

El banco logró un beneficio neto atribuido de 2.797 millones de euros en los nueve primeros meses, un 64,3% más que un año antes, debido al impacto de varias operaciones corporativas y al efecto de la fluctuación de las divisas, sin los que el crecimiento hubiera sido del 15%. En una nota remitida a la CNMV, la entidad explica que las citadas operaciones incluyen el cambio de perímetro tras la incorporación de Catalunya Banc y la compra del 14,89% adicional en el banco turco GarantI.