Mercadona trabaja intensamente en su desembarco en Portugal, su primer mercado internacional, y ya tiene decidida la ubicación de su sede en el país, que estará en Oporto. El presidente de la compañía, Juan Roig, confirmó ayer que el grupo busca ya parcelas para abrir cuatro tiendas en el país vecino en 2019 y que la primera estará también en el entorno de Oporto, según explicó a un grupo de periodistas, tras la clausura del XIX Congreso Nacional de la Empresa Familiar celebrado en A Coruña.

Tal y como la empresa había avanzado a principios del verano pasado, Mercadona se dispone a invertir inicialmente unos 25 millones de euros en ese desembarco, para lo que echará mano de trabajadores que tiene actualmente en Galicia y Castilla y León.

La firma ya ha reclutado a unas 150 personas en Portugal que en este momento se forman en España para trabajar en la implantación y la apertura del primer establecimiento. Roig evitó aclarar cuáles serán los otros tres destinos de la cadena en el país luso, pero es fácil concluir que al menos uno estará en Lisboa y el otro en el Algarve, alrededor de Faro.