Los megacamiones ya son una realidad de las carreteras viguesas. Uno de estos vehículos, operado por el especialista en logística Gefco, conecta a diario la planta de la multinacional automovilística francesa Grupo PSA en Vigo con un proveedor en Madrid, y ya está en proyecto una segunda conexión entre la factoría viguesa y Miranda de Ebro (Burgos), según ha podido saber FARO. Las fábricas del Grupo PSA y Volkswagen AG, Seat Martorell y Volkswagen Navarra, son las primeras en utilizar estos gigantes de la carretera, con una longitud de 25,25 metros, cuyo propósito es reducir es reducir los costes logísticos y las emisiones contaminantes vinculadas al transporte por carretera.

Los primeros ensayos en PSA-Vigo se realizaron ya el pasado marzo, como avanzó FARO en exclusiva, apenas unos meses después de que el Ministerio de Fomento diese su ok a la circulación de los megacamiones por las carreteras españolas. Solo la factoría de Balaídos recepciona a diario una media de 5,6 millones de piezas para el montaje de sus vehículos, lo que supone la entrada y salida de aproximadamente unos 700 camiones. Y el 90% de los aprovisionamientos se realiza por carrera. La Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) ha cifrado en 110 millones de euros el ahorro anual que supondrá para la industria del automóvil española un uso "limitado" de los megacamiones.

Estos vehículos de 25,25 metros de longitud son capaces de realizar entregas de hasta 60 toneladas (los camiones actuales tienen una longitud máxima de 16,5 metros y una masa máxima autorizada de 24 toneladas), lo que genera un importante ahorro logístico por viaje (de alrededor de un 15% en el caso de las plantas de PSA, según La Tribuna de Automoción). José Luis Alonso Mosquera, director de coordinación producción y logística del Polo Industrial Ibérico de PSA, destacó recientemente que estos megatrailers permitirán generar nuevas oportunidades de mejora de la eficacia del flujo logístico del grupo, unidas a "una mejor adaptación" a las necesidades de sus centros.

Todas las rutas de megatrucks deben contar con el visto bueno previo de la Dirección General de Tráfico (DGT). Estos vehículos deben disponer de espejos o detectores de ángulo muerto; sistema de advertencia de abandono de carril o asistencia de mantenimiento en el mismo; sistema electrónico de control de estabilidad y sistema automático de frenado de emergencia, entre otros. Las vías permitidas son autopistas, autovías o carreteras convencionales con calzadas separadas para cada sentido. Solo se pueden incluir vías convencionales de una sola calzada para ambos sentidos de la circulación cuando sea la única carretera posible para llegar hasta el lugar donde se realizarán las operaciones de carga o descarga. Y la velocidad a la que podrán circular es la establecida por el Reglamento de Circulación para los vehículos articulados en función del tipo de vía: 90 km/h en autovías y autopistas; 80 km/h en vías convencionales que dispongan de arcén de 1,50 metros o más, y 70 km/h en el resto de vías fuera de poblado.

Además de las plantas de PSA y Volkswagen, también estudian el uso de megacamiones Nissan Barcelona, Opel Figueruelas, Mercedes Vitoria, Iveco Valladolid y Madrid y Ford Almussafes.