Recta final del año a la baja en Balaídos. La dirección de la planta viguesa de la multinacional automovilística Grupo PSA ha revisado a la baja sus previsiones de producción para el último trimestre de 2016, sobre todo para el Sistema 2, en el que se montan los monovolúmenes Citroën C4 Picasso (en sus dos versiones, de cinco y siete plazas). Así, a mayores de la semana de parada programada desde hace meses para ajustar stocks de vehículos y componentes, la línea de monovolúmenes tampoco trabajará los días 24 de octubre y 4 y 7 de noviembre. Fuentes consultadas por este periódico explicaron que la revisión a la baja de producción afecta a la práctica totalidad de plantas del grupo en Europa.
La línea 1 (furgonetas y sedanes) también se verá afectada por el ajuste de producción, pero no será tan drástico, de forma que para los meses de noviembre y diciembre no habrá sábados ni domingos de actividad, pero no jornadas de parada. Este sistema no trabajará en cambio los días 26, 27, 28 y 31 de octubre dentro de la parada general de PSA para reducir stocks, como ya recogió este periódico.
La menor demanda de monovolúmenes ya obligó a programar para noviembre una reducción de la cadencia de producción de estos modelos, que pasará de 39 unidades a la hora a 31. En la última negociación de medidas de flexibilidad con los sindicatos, la planta ya había advertido de que hasta que se consoliden los próximos lanzamientos adjudicados al centro podrían darse situaciones de baja actividad, por lo que se negoció una serie de mecanismos de flexibilidad entre los que se incluyen expedientes de regulación de empleo temporales y de extinción, con el objetivo de adecuar la plantilla a las necesidades de producción de cada momento. La factoría viguesa elevó un 4,3% su producción entre enero y septiembre, con 336.200 vehículos (el 55%, furgonetas), casi 14.000 más que en el mismo periodo del año pasado, de los cuales el 90% se destinó a exportación.
