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La industria de automoción

El Grupo Copo mejora un 14% sus ventas hasta los 145 millones

El mayor fabricante de componentes encadena tres años de subidas y vuelve a contratar personal

Un trabajador del Centro Tecnológico de Copo. // R.G.

El Grupo Copo, el mayor fabricante de componentes de capital gallego, afronta su futuro con moderado optimismo tras tres años consecutivos de subida de ventas y haberse adjudicado las espumas de los asientos del próximo lanzamiento del Grupo PSA en Vigo y Mangualde (el proyecto K9), según ha podido saber FARO. El consorcio vigués alcanzó en 2015 un negocio consolidado de 144,6 millones de euros, un 14% más que en el anterior ejercicio, y por primera vez en años aumentó su plantilla, que pasó de 768 trabajadores a 786, aunque continúa en niveles de empleo muy inferiores a la época precrisis. La multinacional cuenta hoy con cinco plantas en España (cuatro en Galicia y una en Zaragoza), dos en Portugal y una en México, República Checa y Cuba.

El crecimiento de ventas ha sido constante desde la ejecución del plan de reestructuración que se lanzó en 2013 para atajar las pérdidas cosechadas en el bienio anterior. El plan incluyó un fuerte recorte de costes y de plantilla para mejorar su competitividad y ganar nuevos proyectos, a la vez que la corporación que dirige José Antonio Rodríguez Estévez mantuvo su apuesta por la innovación y los nuevos productos, lo que le llevó a recuperar el control accionarial del Centro Tecnológico del Grupo Copo-CETEC, cuya propiedad compartía a partes iguales con Faurecia desde hace unos años. De esta forma, Copo pasó de 116,3 millones de euros en ventas en 2013 a 126,4 en 2014 y 144,6 en 2015.

La mejora del negocio gracias a los nuevos contratos con firmas como Volkswagen y Renault, entre otras, ha permitido atajar además la reducción de plantilla que la multinacional viguesa venía aplicando desde hace años. Así, en 2015 el volumen de personal de Copo creció hasta los 786 trabajadores, aunque sigue lejos de las cifras que manejaba antes de la crisis (llegó a emplear a más de 1.500 personas entre sus distintas plantas). El último pedido que se ha adjudicado la multinacional es el suministro de las espumas para los respaldos y asientos de la próxima generación de vehículos comerciales ligeros de PSA y Opel, el proyecto K9. Con este pedido, Copo se asegura un negocio anual de entre 10 y 11 millones de euros durante toda la vida serie del K9, es decir, entre 2018 y 2028, apuntalando la producción y el empleo a corto y medio plazo.

En el contrato con el Grupo Antolín, proveedor al que PSA asignó el lote completo de asientos del K9, fue clave la apuesta por la innovación de Copo, que se ha traducido en la introducción de nuevos procesos y materiales que han permitido un importante ahorro para el cliente. En concreto, la firma viguesa suministrará espumas con tecnología en frío y caliente para los asientos y respaldos delanteros y traseros de las furgonetas que PSA lanzará en 2018 en las plantas de Balaídos y Mangualde (Portugal).

Copo está especializado en la producción y elaboración de espumas moldeadas, tejidos, piezas termoconformadas, moldes y utillajes y espumación en bloque para el sector del automóvil y del hogar. La firma inició su actividad en 1969 en Mos en un entorno vinculado industrialmente con el motor y pronto inició su internacionalización.

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