La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y a empresas bajó al 9,44% en el mes de junio, con lo que descendió hasta niveles mínimos de junio de 2012, cuando se situó en el 9,42%, según los datos provisionales del Banco de España. Esta cifra incluye el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que dejaron de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito. Así pues, la mora se situó por cuarto mes consecutivo bajo el umbral del 10 por ciento.