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La Audiencia Nacional cerca al exconsejero y expresidente del comité de auditoría de Pescanova, que escapó a Sudáfrica

Retirada una amenaza de detención contra Robert Williams por sus supuestos problemas de salud -Presidía el comité de auditoría y el juez considera imprescindible su testimonio

El exconsejero Williams. // MPress

La Audiencia Nacional considera imprescindible la declaración de Robert Albert Williams para aportar más luz sobre las causas que provocaron el derrumbe de Pescanova. Íntimo de Manuel Fernández de Sousa y consejero entre 1997 y 2013, este directivo sudafricano huyó a su país de origen tras la declaración de concurso y no se presentó en el juzgado con el resto de imputados de la pesquera para declarar, entonces, ante el juez Pablo Ruz. El nuevo instructor de la causa, José de la Mata, ha amagado con ordenar su detención ante las reiteradas negativas de Williams a comparecer ante la Justicia española. "Se reciba declaración en calidad de imputado con el apercibimiento de que, de no hacerlo, se acordará su detención". El magistrado ha tenido que recular de momento por los supuestos problemas de salud del exconsejero, que presidió el Comité de Auditoría de Pescanova en 2011 y 2012.

"Este instructor considera procedente dejar sin efecto el apercibimiento de la detención de Robert Albert Williams y reiterar la Comisión Rogatoria Internacional", reza el auto del juez, para que comparezca en Ciudad del Cabo por videoconferencia. Es la quinta vez que se envía esta petición de auxilio judicial a Sudáfrica y la cuarta (por ahora) que la Audiencia Nacional no recibe respuesta. En opinión de uno de los principales abogados de la acusación, De la Mata quiere perseverar con Williams antes de cerrar la fase de instrucción tanto por su cargo en el comité de auditoría como por su extensa carrera en Pescanova, en la que aterrizó por sus "amplios conocimientos y experiencia en el sector pesquero".

La defensa del exconsejero ha presentado un informe médico forense que advierte una vasculitis "que conlleva un grave riesgo para su salud" sobrevenida, al parecer, a mediados de 2013. Antes, según las actas de los consejos -en poder de FARO- sí se había desplazado a Chapela en las siguientes fechas: 13 de abril, 22 de junio, 2 de julio, 7 de septiembre, 23 de noviembre [en 2012], 26 y 27 de febrero y 14 de marzo [ya en 2013]. En el consejo del 27 de febrero de 2013 Williams informó que la auditora externa (BDO) "todavía no ha terminado los procedimientos" pese a lo cual la dirección trató, sin éxito, aprobar el balance y resultados del ejercicio anterior. El exconsejero acabaría siendo blanco de críticas de un socio del peso de Luxempart (5,837% del capital) por su condición de presidente del Comité de Auditoría.

"Nos resulta sorprendente que el borrador de cuentas no hiciera mención a las dificultades de tesorería y de obtención de financiación a corto plazo que se nos habían trasladado" por Sousa, decía un escrito firmado por el representante de Luxempart, François Tesch, el 11 de marzo de ese año. "Nos resulta llamativa la contradicción entre las manifestaciones que hizo usted" por poner "en entredicho la eficacia de los sistemas de control" a la hora de elaborar cuentas. Tesch emplazó a Williams a "tomar las medidas oportunas" para tener unas cuentas que "reflejen la imagen fiel" de la multinacional. El balance de 2012 recogía un beneficio de 36 millones, que KPMG tradujo en números rojos de 587,9. Robert Williams está imputado por tres presuntos delitos: falseamiento de información financiera, de cuentas anuales y de documento mercantil.

El consejo del "holding" aprueba las primeras cuentas de la banca

  • El consejo de administración de Nueva Pescanova somete hoy a votación el balance y cuenta de resultados del holding pesquero correspondiente al ejercicio 2015, en el que se prevé un incremento del volumen de facturación y, de momento, números rojos (la compañía perdía más de 25 millones en el primer semestre). Será la primera vez que la banca valide las cuentas como accionista y acreedora al mismo tiempo en un consejo que se celebrará en Madrid (también las juntas, a partir de ahora, no tendrán por qué celebrarse en Chapela). Dos de los consejeros representan a la vieja Pescanova, que necesita las cuentas del holding para corregir su balance anual y poder cursar ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la solicitud para volver a cotizar en el mercado.También mañana arranca en Galicia la negociación del convenio colectivo de las filiales españolas del grupo, integradas ya en Pescanova España (a excepción de Insuiña y Hasenosa). Los sindicatos están a favor de reclamar un único marco laboral para todas las firmas españolas - "es una reclamación de hace 30 años", dice Ignacio Couñago (UGT)- y que afectaría a un millar de empleados en Galicia.

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