Navalia, la Feria Internacional de la Industria Naval de Vigo, ya tiene "reservado" el 95% del espacio disponible en el recinto ferial (Ifevi) a falta de dos meses para el arranque de la que será su sexta edición, que aspira a apuntalar la recuperación de la construcción naval gallega, según señaló ayer la organización. El Ifevi volverá a acaparar la atención mundial de la industria del 24 al 26 de mayo, con un alto nivel de internacionalización y la presencia ya confirmada de astilleros y de compañías auxiliares de países como Holanda, Italia, Alemania, Turquía, Estados Unidos y Francia, así como de Latinoamérica.
La anterior edición de este certamen bianual, celebrada en 2014, se cerró con unos 25.000 visitantes y una elevada actividad comercial, aunque durante el transcurso de la feria no se cerró ningún contrato en la ría de Vigo (aunque sí con posterioridad). Navalia celebró su primera feria en 2006, uno de los mejores años que se recuerdan para el sector naval, con un importante éxito de contrataciones para los astilleros gallegos. Tras las primeras ediciones (2006 y 2008), las siguientes (2010, 2012 y 2014) estuvieron marcadas por las diferentes crisis que afectaron a esta industria, primero la financiera y posteriormente la provocada por la suspensión del antiguo tax lease (el viejo sistema de bonificaciones fiscales que utilizaban los astilleros españoles).
Optimismo
Las previsiones para esta sexta edición, con la que se cumplirán además diez años del lanzamiento de Navalia, son más optimistas. Se esperan más de 25.000 visitantes y más de 500 expositores, y hasta la fecha ya está reservado el 95% del espacio disponible en el Ifevi. Según informó ayer la organización, destaca la presencia de astilleros y empresas de la industria auxiliar de Holanda, Italia, Turquía, Alemania, Francia, Estados Unidos, Suiza y Reino Unido. "Estas delegaciones propiciarán sin duda el aumento de los visitantes internacionales", argumentan los organizadores. En este sentido, ya está confirmada la visita de numerosos armadores pesqueros procedentes de Latinoamérica, a la espera también de que se vayan cerrando las misiones comerciales inversas que también tendrán lugar en la nueva edición.
Esta nueva edición de la feria quiere dar un especial protagonismo a la flota pesquera, máxime teniendo en cuenta que la caída de los precios del crudo ha abortado numerosos proyectos de buques offshore. El certamen acogerá así un encuentro internacional de armadores "para apoyar al sector" y, aunque no haya renovación de flota, desde los astilleros gallegos confían en poder "contribuir a una mejor especialización y tecnificación de los buques y de sus profesionales", como ya avanzó este periódico. Recientemente se ha firmado el primer contrato de un buque arrastrero de capital vigués para una empresa de capital mixto que opera en el caladero de Malvinas, que ya ha comenzado a construirse en la factoría de Nodosa en Marín.
