Indra e Inaer prevén realizar contratos con empresas y centros tecnológicos gallegos por valor de 42 millones de euros en el proyecto de creación del polo industrial y tecnológico de vehículos aéreos no tripulados de Rozas (Lugo) donde deberán permanecer, al menos, diez años.
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha desvelado hoy este dato tras mantener una reunión en la sede del Gobierno gallego con los máximos responsables de estas empresas, Fernando Abril Martorell (Indra) y Manuel López Aguilar (Inaer España). Abril Martorell y López Aguilar se han desplazado a la capital gallega para avanzar en los detalles de la firma del contrato con la Xunta, que se hará probablemente en abril, centrado en desarrollar un polo "pionero" en Europa y en condiciones de situar a Galicia como líder mundial en el desarrollo de aeronaves no tripuladas.
La Xunta resolvió la pasada semana el proceso de licitación para adjudicar a un socio industrial y tecnológico el desarrollo de este proyecto, que finalmente ha ganado la oferta conjunta de Inaer e Indra, que se han impuesto en la fase final a Airbus y Boeing, y que se llevará 40 millones de euros. Ambas empresas, además, se han comprometido a hacer inversiones por 75 millones en Galicia en un proyecto con el que está previsto crear, entre empleos directos e indirectos, unos 600 puestos de trabajo, según Núñez Feijóo.
El presidente y consejero delegado de Inaer, Manuel López Aguilar, ha destacado el potencial de este proyecto que convertirá a Galicia en "centro de referencia para el UAV de uso civil (siglas en inglés de vehículos aéreos no tripulados) europeo y mundial" y que supondrá la creación de una "excepcional plataforma de tecnología de última generación" y de creación de "empleo de calidad". Ha destacado el proceso de diálogo competitivo desarrollado por la Xunta para la contratación, "pionero en la administración española" y ha incidido en el nivel de las empresas presentadas y el interés "mundial" suscitado, "prueba importante de la trascendencia del proyecto". Ha destacado que los compromisos de la oferta son la creación de un centro tecnológico de aplicaciones UAV civiles, junto con Indra, donde se diseñarán y certificarán estos vehículos, así como los sistemas de apoyo.
También se instalará en Rozas un centro de excelencia de mantenimiento de helicópteros tripulados, primero los de Galicia -más de 25 aparatos- y posteriormente los de la flota de Inaer y de su matriz, el Grupo Babcock, y se incorporarán los UAV cuando estén en funcionamiento. Se instalarán tres centros de formación, uno de pilotos de UAV, otro de software y control de equipos y un tercero sobre el control aéreo. En Rozas se instalará además una plataforma tecnológica con empresas, centros de conocimiento y universidades gallegas y una incubadora de empresas para start ups.
López Aguilar ha insistido en que este proyecto colocará a Galicia en condiciones de desarrollar una tecnología en un sector puntero y de futuro, que será "una revolución en los servicios aéreos civiles".
El presidente de Indra, Fernando Abril Martorell, ha incidido en la complementariedad de su oferta con la de Inaer para desarrollar este proyecto del que ha destacado su "alto valor añadido", ya que desarrollará tecnología punta e I+D exportable, así como su orientación a servicios públicos que mejoren la vida de los ciudadanos. Entre otros, ha incidido, en la prevención y extinción de incendios forestales, la detección de vertidos en el mar y el salvamento marítimo.
"Este proyecto convierte a Galicia en la región más innovadora en Europa en un sector que en los próximos años será clave internacionalmente y que crecerá muchísimo". Abril Martorell, además, ha alabado la forma en la que la Xunta ha desarrollado el proyecto, ya que la financiación tendrá "un efecto multiplicador, ayudará a la diversificación del tejido industrial local y favorecerá la creación de empleo de calidad". Ha destacado que Galicia será la base de operaciones del grupo para UAV de uso civil, que la empresa trasladará a Rozas las pruebas de aviones no tripulados; también del Targus, un modelo que cuenta con la opción de ser tripulado o no.
"Si tenemos éxito comercial la planta de ensamblaje" de este modelo se hará en Rozas, ha dicho.
Indra también desarrollará el proyecto de un microrobot submarino no tripulado con capacidad para recoger muestras e instalará una estación de tierra para procesado y análisis de la información captada por los sensores. Además, hará el estudio y desarrollo íntegro en Galicia del futuro helicóptero no tripulado.
Núñez Feijóo ha destacado que este proyecto generará empleo de calidad en Galicia en un sector puntero y supondrá "al menos, una década de presencia y desarrollo" en Lugo de esta tecnología.
Ha destacado la oportunidad de diversificación para empresas gallegas de distintos sectores, como el naval y la automoción, así como el impacto para las pymes y centros de investigación, incluidos los universitarios, gallegos.
