El Banco Popular de China anunció ayer una nueva inyección de liquidez al sistema bancario por valor de 14.900 millones, para asegurar la disposición de liquidez. Como en ocasiones anteriores, esta inyección se realizó a través de acuerdos de recompra inversa, una operación por la que se venden valores condicionados a un acuerdo para recomprarlos en una fecha posterior.