Nueva Pescanova tiene ya configurado el grueso del primer consejo de administración no interino desde la caída de Manuel Fernández de Sousa. Un equipo que será designado el 25 de febrero en junta general y que se caracteriza por tener un perfil multidisciplinar y especializado en dos áreas: la comercial y la financiera. La primera, para devolver al grupo al volumen de ventas que se esfumó con la quiebra; la segunda, para efectuar la difícil transición postconcursal con estrecheces económicas y un plan de pagos que hará que la prioridad sea una expansión orgánica, sin grandes inversiones. La banca acreedora tiene ya seis nombres, a mayores de los de Jacobo González-Robatto (futuro presidente) e Ignacio González (consejero delegado). Faltan otros cuatro: dos por parte de las entidades y otros tantos de la vieja Pescanova.
Uno de ellos es Fernando Valdés, excompañero de Ignacio González. Nacido en 1959 y licenciado en Química Orgánica, fue consejero delegado de Campofrío Food Group, compañía que abandonó con la llegada de Ricardo Doehner el pasado ejercicio. Especializado en marketing y ventas, será nombrado consejero de la Comisión Comercial Estratégica de la multinacional. Ocupó diversos puestos en Unilever, la misma compañía que en 1995 planteó una OPA sobre Pescanova, atenazada por una elevada deuda. Valdés coincidirá en la pesquera precisamente con el conselleiro que ocupaba la cartera de Industria cuando Manuel Fraga acudió al rescate de la pesquera de Chapela ante la amenaza de la multinacional anglo-holandesa. Se trata de Antonio Couceiro, ex director general de Begano y actual consejero de Inveravante, la firma a través de la que canaliza sus inversiones el coruñés Manuel Jove.
De un perfil más financiero es Mariano Riestra. Tiene una gran trayectoria en banca y comenzó su carrera en Deutsche Bank, aunque fue en Commerzbank donde desarrolló su carrera. Empezó como director de oficina en Barcelona y se convirtió, en 2009, en Country Manager de España del banco alemán. Fue consejero y vicepresidente de la Cámara de Comercio alemana en nuestro país. Del mundo bancario procede también Óscar García Maceiras, licenciado en Derecho en A Coruña y Premio Fin de Carrera en Galicia. Abogado del Estado entre 2001 y 2005, se incorporó ese mismo año a Banco Pastor y más tarde al Popular. Actualmente es secretario del consejo y director general de Desarrollo Corporativo y Asuntos Legales de la Sareb, el banco malo.
Completan la lista -a falta de conocer los otros cuatro- José Luis Sáenz de Miera y Ramón Mas Sumalla. El primero fue presidente y consejero delegado de Cementos Portland. Trabajó en la auditora y consultora KPMG Peat Marwick, aunque el grueso de su carrera la desarrolló en el sector cementero. Abandonó Portland con la llegada del mexicano Carlos Slim al accionariado. Mas Sumella, por último, fue consejero delegado de General Óptica o director general de Caprabo. Preside a día de hoy la firma patrimonial de la familia Lara, Hemisferio Norte.
