El fabricante francés de automóviles Renault, a través de la empresa conjunta que mantiene en China con la empresa local Dongfeng, Dongfeng Renault Automotive Company, inauguró ayer su primera planta en el país asiático, situada en Wuhan, donde se fabricará el modelo Kadjar, que también se produce en Palencia. El primer centro productivo de Renault en China cuenta con una capacidad de producción anual de 150.000 vehículos, aunque esta cifra se podría elevar hasta 300.000 unidades al año, mientras que la plantilla cerró 2015 con 2.000 trabajadores.