Enero, segundo mes consecutivo de pérdidas en la Bolsa española, terminó con una caída del 7,63%, lo que significa que es el peor mes de enero desde la crisis, en concreto, desde el 2012. Esto se debió, según los expertos, a la desaceleración de la economía mundial y el abaratamiento del petróleo.

La cotización del crudo Brent, que llegó a perder este mes cerca de un 30% (cerraba el año por encima de 37 dólares y bajaba a 27 dólares hace poco más de una semana), mostraba el exceso de producción, los rifirrafes entre los grandes países del Golfo Pérsico y las menores expectativas de crecimiento de algunas economías.

El segundo mes consecutivo de descensos de la bolsa nacional (pierde algo más del 15% en este período) también estuvo condicionado por el retroceso de la banca nacional, contagiada por los problemas que arrastra el sector en Italia y por algunas sentencias desfavorables (cláusulas suelo y opv de Bankia).

Este mes de enero, el primero en el que cae la bolsa desde el 2012, de los valores del principal indicador del mercado nacional, el IBEX 35, bajaron treinta y subieron cinco.