El crecimiento del PIB seguirá siendo notable en los próximos trimestres, aunque algo más moderado, porque irán desapareciendo algunos de los elementos de impulso actuales y se confirmará la ralentización de las economías emergentes. Así lo pone de manifiesto el servicio de estudios de CEOE, tras asegurar que el PIB creció un 0,8% en la última parte de 2015 y un 3,2% en el conjunto del año, la mayor cifra desde 2007.