El Gobierno portugués dio esta semana un paso más para anular el contrato del transporte urbano de Oporto, que había ganado la empresa asturiana Alsa. El líder de la cartera lusa de Medio Ambiente, Joao Matos Fernandes, afirmó ayer que su expectativa es que "no haya ninguna indemnización" para las empresas concesionarias de los diferentes servicios que el anterior Ejecutivo había convocado. Están afectados la empresa mexicana ADO Avanza (propietaria de Vitrasa, que iba a gestionar los autobuses y el metro de Lisboa), la española Alsa (autobús de Oporto) y la francesa Transdev (metro de Oporto).