La factoría de Vigo de PSA Peugeot Citroën trabaja en varios frentes con el objetivo de captar nuevos lanzamientos que consoliden su modelo biflujo, o lo que es lo mismo, que aseguren la supervivencia de las dos líneas actuales de producción. El propio director de PSA-Vigo, Yann Martin, reconocía a FARO el pasado enero que Balaídos trabaja "siempre" por traer nuevos modelos y que había un "hueco de dos años" para conseguir proyectos. La reducción del número de modelos de PSA (de los 45 actuales a 26 en 2020) y la implantación en otras fábricas de las nuevas plataformas modulares como la de Balaídos han intensificado la competencia entre factorías. PSA-Vigo se ha posicionado para acoger un nuevo proyecto con diferentes siluetas, que se repartirían con otros centros en Francia y Eslovaquia, según ha podido saber FARO. Aunque se trata de un proyecto en una fase de desarrollo muy temprana, algunas fuentes apuntan a que su lanzamiento -en caso de recibir Vigo la inversión- sería poco posterior al del K9, y que las cifras de producción asociadas a este nuevo modelo garantizarían el mantenimiento de esa segunda línea.