La industria agroalimentaria española logró frenar el avance de la marca blanca o del distribuidor en 2014 por vez primera en España en 20 años, pero lo hizo asumiendo costes: bajando más sus precios y aumentando las promociones para captar al consumidor. Con este esfuerzo, las enseñas comerciales de los fabricantes lograron no solo detener la erosión constante de su cuota de mercado durante 20 años, sino también recuperar 1,7 puntos respecto a 2013, según un estudio hecho público ayer por la consultora Nielsen. Tras esta recuperación, los productos alimentarios con marca del fabricante pasaron en un año de suponer el 37% del mercado a representar el 38,7%. Las llamadas MDD (marcas del distribuidor) controlan aún en conjunto el 61,3% del mercado.
Los españoles mantuvieron el gasto por hogar en alimentación, bebidas, perfumería y droguería, (aún no hay recuperación en los niveles de consumo de productos básicos) y lo hicieron extremando aún más la búsqueda de ofertas, descuentos y precios bajos. Este propósito de ahorro los condujo un año más a aumentar el número de visitas que realizan a los establecimientos (el 1,3% más que en el ejercicio anterior) pero para realizar compras por importes cada vez menores (el 1,1 menos que en 2013) con el fin de aquilatar y ajustar el gasto a lo estrictamente necesario, salvo alguna gratificación o gasto extra (sobre todo, en fines de semana) amparándose en que han reducido las salidas y el gasto en hostelería, que cayó el 63% desde 2008.
El afán por el precio ha llevado al consumidor español a ser cada vez más infiel con las marcas y con las cadenas comerciales en las que se abastece y emigra de unas a otras en función de los precios. El 12% reconoce que cambia de marcas según las promociones, el 37% busca los productos en oferta sin cambiar de tienda y el 24% opta por hacer la compra en una u otra cadena de supermercados o hipermercados según los precios.
Para defenderse de las marcas blancas, las marcas de los fabricantes fueron las que más bajaron sus precios mediante promociones en 2013, aseguró Nielsen. Dada la mayor frecuencia de visitas a las tiendas, los productos frescos se han convertido en un factor crucial de atracción de clientes, y en esta pugna supermercados e hipermercados ganaron 7 puntos de cuota: pasaron de dominar el 51% al 58%.
