La propuesta de convenio no determina una quita lineal, por lo que no tendrá la misma incidencia en todos los bancos. Dos entidades son las más perjudicadas por la propuesta, como reconocen fuentes financieras, pero las mismas fuentes insisten en que "es importante mantener el grupo bancario unido, porque todos estamos de acuerdo en que la manera de presentar la primera oferta no fue de recibo", dicen sobre la decisión del consejo de no informar previamente a la banca.

"Hay bancos que no solo perderán dinero con la quita", agrega otra fuente financiera. "Es lógico que estén descontentos". Como avanzó FARO, la quita media que se aplicará a la deuda de las filiales rondará el 60%, ya que se trata de activos productivos cuyo pasivo se puede afrontar, por ejemplo, con su venta. El problema es la deuda asociada a la empresa matriz, Pescanova SA, donde la quita va a superar el 90%. Los bancos más atrapados a este pasivo serán los que salgan más perjudicados de la propuesta de convenio, aunque eso "no implica que nos hayamos desunido por eso, podría habernos pasado a cualquiera". La banca, en todo caso, continuará preparándose para un eventual escenario de liquidación, en el que pretenderían adquirir en bloque casi toda la compañía.