Trabajadores del astillero vigués Construcciones Navales Paulino Freire volvieron a concentrarse ayer ante las puertas de la factoría naval para protestar por la decisión de la dirección de no negociar las condiciones del nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal. La última jornada de negociación del ajuste finalizó sin acuerdo, y los empleados denuncian que Freire quiere implantar un expediente "a su manera, sin negociar ningún punto".

El astillero, que cuenta con una plantilla de 62 trabajadores, ya se encuentra inmerso en un ERE rotatorio que afecta a la totalidad de la plantilla y que finalizará el próximo 31 de agosto.

Sobre esta situación, el representante de CC OO en el comité de empresa, Darío González, denunció que la dirección no ha respetado las condiciones pactadas en su día, sobre todo en lo referente a la rotación desigual de la plantilla y a la utilización de mano de obra de empresas auxiliares en puestos de los trabajadores fijos, problemáticas ante las que la empresa, según González, "mira hacia otro lado".

El próximo lunes, los trabajadores volverán a reunirse con la empresa para analizar el cumplimiento del expediente.