La rebaja de un 10% en los salarios de los españoles propuesta por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y apoyada el vicepresidente económico de la Comisión Europea (CE), Olli Rehn, no cuenta con apoyos dentro del país. Tras las declaraciones de Rehn en las que defendía la reducción salarial asegurando que España debe seguir reformando y mejorando el funcionamiento de su mercado laboral, partidos políticos, sindicatos y patronal han expresado su desacuerdo con el dirigente europeo.

"No nos extraña de quien viene", aseguró el secretario comarcal de UGT Vigo, Antonio Juste, y apuntó que con propuestas de este tipo las instituciones siguen apostando por el firme propósito de que "los ricos sean más ricos y los pobres sean más pobres". Juste advirtió además de que en la comarca de Vigo en los dos últimos años los salarios se han reducido un 15%, por lo que con esta medida se estaría reduciendo "aun más el exiguo consumo que tenemos en estos momentos".

A nivel nacional, el director de Comunicación de CC OO, Fernando Lezcano, expresó también el "absoluto rechazo" del sindicato a la propuesta porque considera que desde que empezó la crisis las políticas que se han llevado a cabo han ido "en la dirección de la devaluación interna". Por su parte, el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, en un comunicado, tildó la medida de "descabellada" porque rebajar aún más los salarios de los ciudadanos condenaría a España "a la miseria".

El presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), José Manuel Fernández Alvariño, manifestó también su rechazo a las manifestaciones de los organismos europeos. "Se busca la contratación, por lo que no estamos en absoluto de acuerdo", aseguró. Alvariño no quiso desmarcarse del anuncio de la CEOE sobre el mantenimiento del acuerdo salarial firmado en enero de 2012 con los sindicatos. "Respetaremos el acuerdo", zanjó. También el vicepresidente primero de la CEOE, Arturo Fernández, replicó al vicepresidente económico de la CE, señalando que "no es el momento oportuno ni para subir más los impuestos ni tampoco de bajar los sueldos"

Al acuerdo firmado entre patronal y sindicatos también se remitió ayer el Gobierno, asegurando que ha funcionado "muy bien" y ha servido para recuperar la competitividad gracias al "esfuerzo" de trabajadores y empresas. Además, el portavoz de Economía del PP en el Congreso, Vicente Martínez-Pujalte, censuró las palabras de Rehn "por parciales y por sembrar la desconfianza en los ciudadanos".

"Le pido a Olli Rehn que se olvide de sus recetas, porque han sido nefastas para España", expresó el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba. El jefe de la oposición llegó a calificar de "veneno" las fórmulas de Rehn, recordando que -a su juicio- hasta el momento han sido "muy malas para España".

El diputado nacional de Izquierda Unida por Asturias, Gaspar Llamazares, calificó la rebaja salarial propuesta como propia de un modelo "esclavo" de empleo. Además, Llamazares señaló que no se puede aceptar que un comisario europeo utilice su blog como un ciudadano más dadas las responsabilidades de su cargo. Por su parte, la portavoz nacional de UPyD, Rosa Díez, calificó la propuesta de una "obscenidad" y una "indignidad".