El Ministerio de Hacienda no asumirá en su totalidad los costes del sistema eléctrico previstos en la ley, sino una parte "muy inferior", y provocará de esta forma que buena parte de la carga de la reforma energética que estudiará hoy el Consejo de Ministros caiga sobre consumidores y empresas, lo que anticipa subidas del recibo de la luz y fuertes recortes a los operadores, indicaron a Europa Press en fuentes del sector.

La decisión de Hacienda, con la que el departamento dirigido por Cristóbal Montoro se desvincula del deseo del Ministerio de Industria de que parte de los costes recaigan sobre las cuentas públicas, ha sido anunciada por el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, a las grandes eléctricas y empresas de renovables en la reunión de esta tarde para informar acerca de la reforma energética.

En concreto, Montoro se ha negado a asumir, conforme establece una ley del Gobierno anterior, los extracostes de las actividades extrapeninsulares, esto es, las correspondientes a Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla.

Las fuentes interpretan que Hacienda ha ganado la partida a Soria e indican que el principal recorte se producirá previsiblemente en la actividad regulada de distribución, de hasta el 20%, lo que complicará las nuevas inversiones e incluso podría afectar a la calidad del suministro.

Este recorte ha dejado muy preocupadas a las eléctricas, que esperaban unas medidas de menor envergadura y que incluso podrían encontrar elementos discriminatorios entre la minoración sufrida por su negocio y el de algunas actividades de renovables, que saldrían menos perjudicadas.

El plan que maneja Industria no supondrá la eliminación definitiva del déficit de tarifa, si bien incluye un fuerte aparato normativo compuesto por un real decreto ley de medidas de sostenibilidad financiera, un anteproyecto de ley del sector eléctrico y ocho reales decretos.

Hibernación de ciclos

Entre los reales decretos figuran, aparte del de autoconsumo, un real decreto con un plan para la hibernación o el cierre de los ciclos combinados de gas en una cantidad de instalaciones importante.

Las grandes eléctricas han salida molestas y preocupadas de la reunión ante lo que consideran un escenario muy negativo para su actividad. Estas compañías entienden que, tras haber realizado importantes esfuerzos para atajar el déficit de tarifa, deben pagar ahora de forma adicional los errores tanto de éste como de los anteriores gobiernos.