La OCDE corrigió ayer a la baja sus previsiones sobre la economía española para este año y el próximo, cuando la salida de la recesión y "una lenta recuperación" no evitarán que la tasa de paro llegue a superar el 28%. Apunta además a un leve descenso del déficit, hasta el 6,9% en 2013 y del 6,4% el año próximo.

En su informe semestral de perspectivas, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) indicó que el Producto Interior Bruto (PIB) de España en 2013 caerá un 1,7 %, lo que significa un resultado no sólo peor de lo que había estimado en noviembre (-1,4%), sino también del último anunciado por el Gobierno español (-1,3%) y por la Comisión Europea (-1,5%).

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, destacó que España "ya ha tocado fondo" y consideró "muy positivo" que la propia OCDE reconozca que en 2014 habrá crecimiento en el país. Por contra, Comisiones y UGT aseguraron que el empeoramiento de las previsiones de la OCDE "certifican" el fracaso de las políticas del Gobierno del PP.