Finalmente serán nueve las entidades financieras que aporten los 55 millones de euros que Pescanova necesita para subsistir durante, al menos, "un horizonte de cuatro meses". La banca acreedora, representada por el llamado steering committee, mantuvo ayer una conference call (reunión telefónica) para cerrar los últimos flecos del pliego de condiciones que han acordado poner sobre la mesa para inyectar liquidez en la multinacional pesquera. Pese a que así se había anunciado el lunes, Deloitte no se reunió ayer con las entidades. Según fuentes financieras consultadas por FARO, BBVA, Santander y Bankinter accedieron a participar del grupo de bancos que acudirá al rescate de Pescanova con 55 millones básicos para hacer frente al gasto corriente. La marca Pescanova es, finalmente, la garantía para ejecutar esta operación.

De este modo las entidades que van a participar de esta inyección exprés de liquidez son: Banco Sabadell, Popular, NCG Banco, CaixaBank, Bankia, Deutsche Bank y los de nueva incorporación (BBVA, Santander y Bankinter). Pese a los intentos de la administración concursal, Deloitte, Liberbank no ha querido participar finalmente de esta operación. Las tres entidades que se han incorporado a la misma suman, de acuerdo con los datos del administrador judicial de Pescanova, una deuda de 231.231.950 euros con la multinacional que preside Manuel Fernández de Sousa. Ocupan el puesto 13, 14 y 15 de la lista de bancos acreedores, respectivamente, por volumen de créditos pendientes de cobro.

Entre los bancos que figuran en las primeras posiciones de esta copiosa lista (con más de 100 entidades) y que no han querido participar de la inyección exprés de liquidez a Pescanova están el portugués Banco Caixa Geral, cuya alta exposición a la pesquera gallega fue duramente criticada por los socialistas lusos en una interpelación parlamentaria al primer ministro, Pedro Passos Coelho. También figura UBI Banco Internacional (Luxemburgo), Liberbank, Commerzbank (Alemania), Banco Espírito Santo (Portugal) y Ceiss. La banca internacional, con la única excepción de Deutsche Bank, rechazó desde el primer momento atender a cualquier petición de Pescanova y preferían provisionar todo el crédito "y marcharse", como indicaron fuentes financieras.

La marca, no Frivipesca

Desde los bancos explicaron a este diario que su intención era la de enviar el informe con las condiciones del préstamo en la noche de ayer o esta mañana "como muy tarde", con la intención de acelerar el proceso y de que "el aspecto más burocrático quede zanjado antes del viernes". Una vez Deloitte reciba la documentación tendrá que analizarla. La banca ha accedido a que la marca Pescanova se utilice como garantía en esta inyección de 55 millones, que tendrán la consideración de deuda privilegiada y se devolverán a un tipo de interés de en torno al 5% a un año. Según pudo saber FARO, se barajó la posibilidad de utilizar la filial Frivipesca como aval, aunque finalmente se prefirió la marca. Deloitte también había propuesto utilizar el beneficio antes de impuestos y de gastos financieros, el Ebitda, como garantía..

Una vez estudiadas las condiciones de los bancos, la administración concursal deberá remitir al juez titular del caso -Roberto de la Cruz- esta documentación a fin de que él lo autorice. Las entidades dan por sentado que no habrá ningún problema para que el magistrado otorgue el plácet, toda vez la falta de liquidez amenaza con paralizar la actividad de la flota y las granjas acuícolas de Pescanova, además de no poder hacer frente a las nóminas de la plantilla.

Eso sí, creen que el dinero no llegará a las arcas de la pesquera hasta la próxima semana. Deloitte ya garantizó al comité de empresa que las nóminas de mayo y junio estaban garantizadas, aunque no se pronunció sobre los pagos futuros.