Hijos de J. Barreras, el mayor astillero privado de España y actualmente en proceso concursal, ha formalizado ya la nueva propuesta de convenio con los acreedores, que pasa por fijar una quita del 80% y la reducción del plan de pagos. Son las dos grandes novedades que ha puesto sobre la mesa la compañía controlada por José García Costas (del grupo Emenasa), y que también ha presentado un plan de viabilidad con el horizonte puesto en el año 2016. Ya en 2014, y como consta en éste último documento, Barreras prevé un resultado positivo de 9,2 millones de euros.

Como avanzó FARO, la quita ha pasado del 95 al 80% debido a la reticencia en bloque de los acreedores a la anterior propuesta formulada por el astillero. Asimismo reduce de manera considerable el plazo para devolver las deudas, con un tope máximo de 48 meses (4 años) frente a los 15 formulados anteriormente.

La propuesta, a la que ha tenido acceso este periódico, se formula como "la única alternativa para poder afrontar un plan de viabilidad" que evite la liquidación de la empresa viguesa. "La propuesta de convenio exige sin duda una enorme dosis de sacrificio para los acreedores", reconoce Barreras, pero incide en que "es la única solución viable" para su futuro. Fuentes próximas al astillero reconocieron a FARO que el proceso ha sido "tenso" y que el proyecto de futuro se ha consensuado tras "muchas negociaciones". El lunes habrá una primera toma de contacto entre la empresa y la plataforma de acreedores.

El proyecto

El astillero detalla en su plan de viabilidad un complejo mapa temporal en el que se dibuja el llamado "plan maestro de construcción". El primer proyecto se iniciaría en septiembre, si bien en la documentación aportada no se indica ninguna oferta en firme para la construcción de nuevos buques. Únicamente hace referencia a que la dirección "baraja ofertas de distintos tipos".

A partir de septiembre, el comienzo de corte del nuevo proyecto se iniciaría en febrero de 2013. El primer barco del nuevo Barreras se entregaría en abril de 2014. El año próximo, según el plan de viabilidad, se pondrían en marcha otros dos buques (en la grada 1 y dos). Barreras considera un máximo de entregas de tres barcos por año. La dirección de la compañía se basa en "criterios de rigor", la "hipótesis de que esté liberada de la situación concursal" y, por último, "con la posibilidad de que pronto exista un sistema aceptable de tax lease en vigor", dice textualmente el plan de viabilidad. La grada 1 estaría ocupada hasta, al menos, el mes de marzo de 2017.

El convenio

El plan de pagos para los acreedores se divide en cuatro tramos y entrará en vigor en el momento en el que el juez apruebe la propuesta de convenio, como establece el artículo 133 de la Ley Concursal. El 25% de la deuda, una vez aplicada la quita, se pagaría en el plazo de 12 meses tras el visto bueno del juez. La misma dinámica se repetiría hasta un cuarto y último tramo, a pagar en un máximo de cuatro años.

El convenio con los acreedores garantiza, según la empresa, la "continuidad de la actividad empresarial" con la vista puesta en la salida del proceso concursal. Barreras propone la creación de una "comisión de vigilancia", formada por un representante de Barreras y dos de los acreedores, para que evalúen cada dos meses la evolución del plan de viabilidad.

¿Y cómo se genera la liquidez que permita dar cumplimiento al convenio, además de la consecución de contratos? La empresa incluye en su propuesta la venta o alquiler de hasta cuatro terrenos ociosos, situados entre la Avenida de Beiramar y Tomás A. Alonso, que tienen una superficie de 22.000 metros cuadrados. Barreras "se compromete a llevar a cabo" las "actuaciones urbanísticas necesarias" que permitan la recalificación de los terrenos, de modo que pasen a ser de uso comercial. El plan detalla cuáles son las "posibilidades de generación de renta" a partir de la enajenación de los bienes. En primer lugar, la "venta directa" de los terrenos. El dinero procedente de estas operaciones iría "directamente" al pago de la deuda. Una segunda vía es la "urbanización" de las parcelas para fines comerciales, que serían ofrecidas en alquiler. Barreras asegura que hay "interesados" en estos arrendamientos "a un plazo de 20 años". El astillero calcula que los recursos que se generarían mediante el alquiler ascenderían a dos millones de euros al año.

Menos plantilla

En cuanto al marco laboral, Hijos de J. Barreras considera que la plantilla del astillero no puede exceder de las 80 personas, frente a las 134 actuales. Por eso plantea la extinción de 54 contratos. Además, establece la jubilación obligatoria a los 65 años para "favorecer la posición competitiva en el mercado de la empresa" y, "en su caso, facilitar la creación de empleo".

Las 80 personas que formarían parte de la plantilla tendrían que aceptar, una a una, un "nuevo marco retributivo" y de convenio colectivo para hasta, al menos, el año 2016. La reducción salarial es muy pronunciada. Barreras aspira a tener un coste de personal de 3,5 millones al año, frente a los 8 millones anteriores. Los empleados del grupo 1 (alta dirección) cobrarán un 81% menos. Los del grupo 5 (empleados administrativos) otro 25% menos. La rebaja media es del 56%. La quita del 80% afecta también a los salarios y otros conceptos que se adeudan a los trabajadores

Accionistas

Barreras propondrá lo que se conoce en términos empresariales como una operación acordeón, que implica la reducción de capital a cero para ampliarlo posteriormente en 6 millones. Prevé la entrada "inmediata" de dos socios, aunque no menciona nombres. Asimismo, asegura que hay "otros inversores" interesados en formar parte del proyecto. Barreras prevé que la Xunta aporte el 80% del capital en un inicio y a devolver en un plazo de diez años.