El ministro de Industria, José Manuel Soria, anunció ayer que la luz se encarecerá a partir del próximo día 1 de abril, aunque no anticipó en qué proporción lo hará. Soria achacó esa cercana subida a una reciente resolución del Tribunal Supremo que, a instancias de las compañías eléctricas, considera ilegal que el Gobierno, recién llegado al poder, congelara la tarifa a finales el pasado enero, en una decisión compartida con el anterior Ejecutivo. El Ministro ha avisado, no obstante, de que el esfuerzo que impone esa sentencia, aún por cuantificar, no recaerá en exclusiva sobre los consumidores. Según datos recientes, el precio de la luz para los hogares españoles ya es el tercero más alto de Europa, solo inferior a los que pagan las familias de Chipre y Malta.

El precio de la electricidad quedó congelado a principios de este año después de que entre el anterior y el actual gobierno se pactara una intervención política: no subir la parte regulada del recibo (la mitad de la tarifa) más allá del 10%, de manera que gracias al descenso en el coste de la energía (la otra mitad de la tarifa) la cuenta final diera un resultado neutro. Pero las grandes eléctricas denunciaron que tal decisión generaba un aumento ilegal del déficit tarifario (desfase entre costes e ingresos). El Supremo asume ese criterio y manda que se revisen las tarifas con carácter retroactivo al 1 de enero para compensar un desajuste de casi 1.000 millones de euros.

Industria esperará al 1 de abril para tomar una decisión. En esa fecha toca realizar la revisión trimestral de los precios. ¿Cuánto puede subir la luz? Según informó ayer el diario "Cinco Días", las eléctricas han estimado que el auto del Supremo puede conllevar por sí mismo una subida de hasta el 17% para 22 millones de consumidores domésticos y pequeños negocios. No obstante, el Ejecutivo tiene capacidad de maniobra para moderar ese impacto, modificando por ejemplo los límites máximos de déficit tarifario que el Ministerio fija para cada año.

José Manuel Soria confirmó que "previsiblemente" la luz subirá en abril, pero señaló también: "se equivocará quien piense que todo va a ser a cuenta del consumidor". El ministro adelantó a renglón seguido que su departamento ultima una batería de medidas para frenar el déficit de la tarifa eléctrica y que incluyen, además de posibles subidas de precios, reducciones de costes. Esto es, menores ingresos para las compañías del kilovatio. En el contexto de la reforma energética que está en preparación, las empresas eléctricas temen que el Gobierno intente imponer una quita de la deuda contraída con el sector.