Hace años que Mister Zara, como se conoce a Amancio Ortega en el mundo de la moda, ostenta también el título de rey de la Castellana de Madrid, y la compra de la emblemática torre Picasso por 400 millones confirma que su hegemonía continúa intacta en la principal arteria de la capital, donde posee seis codiciados inmuebles.

El fundador y máximo accionista de Inditex, que anunció a principios de año que dejaba la presidencia, se despide de 2011 convertido, posiblemente, en el empresario español con la cartera inmobiliaria más amplia y valiosa, tras cerrar el miércoles la mayor compraventa de los últimos años en España.

En el peor momento del sector, Ortega ha sabido sacar partido a la caída de los precios para adquirir activos inmobiliarios bien situados, al aprovechar las gangas que entidades financieras y grandes empresas han puesto en el mercado en las principales ciudades del mundo. Gracias a los buenos resultados de Inditex, Ortega €que solo en 2010 recibió 591,36 millones de dividendos de la compañía€ dispone de liquidez y de fácil acceso al crédito para realizar grandes inversiones inmobiliarias. Su sociedad de inversión, Pontegadea Inmobiliaria, cerró 2010 con un beneficio de 130,2 millones y con 2.428 millones de fondos propios.

El propietario de la multinacional gallega comenzó su actividad inmobiliaria en 2002 €poco después de cerrar la salida a Bolsa de Inditex€ con la compra de cuatro hoteles a NH. Desde entonces continuó aumentando de forma imparable su cartera de activos.

Sus adquisiciones siguen un patrón muy definido: edificios de oficinas y comerciales con una ubicación privilegiada, que cuentan con una tasa de ocupación prácticamente plena y cuyos inquilinos acostumbran a ser grupos fuertes y con contratos a largo plazo.

La torre Picasso encaja en el perfil. Está situada en el madrileño distrito financiero de Azca, cuenta con más de 78.000 metros cuadrados dedicados a oficinas y establecimientos comerciales, roza el 100% de la ocupación y entre sus inquilinos están firmas internacionales y nacionales de renombre.

La operación puede considerarse todo un éxito, ya que la primera fortuna de España y la novena del mundo según la revista Forbes, pagó menos de la mitad (400 millones) de lo que costaba el inmueble en 2007, antes de la crisis, cuando fue tasado en 850 millones. Solo en rentas, su anterior propietario ingresaba cerca de 30 millones de euros al año.

Ortega también posee edificios emblemáticos bajo la modalidad de sale and leaseback €operaciones en las que el vendedor se queda como inquilino durante un plazo de 25 a 40 años€, en su mayoría adquiridos durante los procesos de desinversión de algunas entidades financieras.

Algunos ejemplos son la compra de diez edificios al Banco Santander por unos 500 millones en 2007; la adquisición de 40 inmuebles de Caixa Galicia en 2008 por 250 millones, y 5 locales del Sabadell en diciembre de 2010, por 55 millones.

Las inversiones inmobiliarias de Pontegadea en España ascienden a 1.007 millones de euros, mientras que en el Reino Unido tiene activos por valor de 455,3 millones, según Cinco Días. Este año cerró en Londres la compra de un inmueble de 4.000 metros cuadrados en el corazón comercial de la capital inglesa, por 250, 4 millones.

En la actualidad, Ortega es una de las fortunas más activas en la compra de grandes inmuebles.

Pese a comenzar su carrera en el ladrillo en 2002, sus adquisiciones en el extranjero despegaron con el del estallido de la crisis de las hipotecas subprime, gracias a la debilidad del dólar frente al euro y el desplome de los precios en el mercado inmobiliario estadounidense.

Entre 2007 y 2009 invirtió más de 700 millones en edificios emblemáticos de Chicago, Boston, Miami y Manhattan. Cabe destacar el rascacielos en la calle 59 de Nueva York, el hotel de lujo Epic en Miami, un centro comercial en Chicago, una galería comercial en San Francisco y la sede del Banco de Atlanta en Washington.

En el extranjero, además de en EE UU y Reino Unido, tiene inversiones en México, Portugal, Francia, Alemania e Italia. Una de sus últimas adquisiciones en el país transalpino fue el Palazzo Bocconi, en Roma, donde se ubica la tienda 5.000 de Zara. Ortega también impulsó la compra de otras sedes emblemáticas de su cadena estrella, como la de la Quinta Avenida de Nueva York o la de Milán €335 millones€, pero ambas pertenecen a la cartera de activos de Inditex, no de Pontegadea.