Los efectivos gallegos de salvamento marítimo vivieron ayer una mañana de intenso trabajo como consecuencia de los naufragios de dos pesqueros artesanales frente a las costas coruñesas, ambos sin víctimas mortales. Los distintos medios desplegados por Salvamento Marítimo lograron rescatar en buen estado de salud a los cinco marineros implicados en los siniestros.

El primero de ellos se produjo a las 09.35 horas, cuando la tripulación del barco "María Encarnita" –con base en A Coruña– alertó por llamada selectiva digital de que el buque se hundía entre la entrada de la ría de Ferrol y la playa de Doniños. El centro de Salvamento Marítimo de A Coruña coordinó el rescate y movilizó a la zona la embarcación "Salvamar Mirfak", que se encontró a los tres marineros del pesquero en el agua, con síntomas de hipotermia.

La unidad de intervención de Sasemar desembarcó a los tripulantes –los tres de nacionalidad peruana– en el muelle de Oza, donde los recogió una ambulancia para llevarlos al Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña. Los facultativos del centro sanitario constataron que los rescatados tenían "síntomas leves de hipotermia" y, pasadas unas horas –en torno a las 15.00 horas– recibieron el alta.

El otro suceso ocurrió también a media mañana, cuando la embarcación de artes menores "Sardiñeiro" –con base en O Barqueiro (Mañón) y dos marineros a bordo– faenaba en las proximidades de Estaca de Bares. El pesquero quedó a la deriva tras enganchársele el aparejo a la hélice, por lo que acabó estrellándose contra las rocas y sufrió una vía de agua.

El Centro de Coordinación de Salvamento de Fisterra recibió la alerta a través del 112 y movilizó a la zona la embarcación de rescate "Salvamar Shaula" y el helicóptero del Servizo de Gardacostas de la Xunta "Pesca 2", con base en Celeiro (Viveiro).

Cuando la aeronave de la Consellería do Mar llegó a la zona del siniestro, el "Sardiñeiro" ya se había hundido y los dos tripulantes se encontraban a bordo de una balsa salvavidas a la espera del rescate. Los efectivos del "Pesca 2" izaron a bordo a los dos marineros, en buen estado de salud, y los trasladaron al puerto de Celeiro.

Los dos buques siniestrados eran de madera y tenían menos de 10 metros de eslora.