El presidente de la naviera noruega Rieber negocia con Vulcano un nuevo sísmico

El presidente de la naviera noruega GC Rieber Shipping, Hans Petter Amundsen Klohs, se entrevistará mañana con la dirección del astillero Vulcano con un doble objetivo. Por una parte, interesarse por la terminación del sísmico 533 que se encuentra en construcción gracias a los avales de 21 millones de euros concedidos por la Consellería de Industria (16,7 millones) y Pymar (4,3 millones); y por otra, negociar la construcción de un nuevo buque similar en el astillero vigués tal y como estaba previsto en su plan de flota.

Este último sísmico, el 535, había sido cancelado al astillero asturiano Juliana por la demora en los plazos. La única parte que se había construido del barco eran algunos bloques del casco que se encuentran en el astillero gijonés y cuyo destino depende de los administradores judiciales.

Desde la dirección de Vulcano se destaca “el gran interés” que tiene Rieber en construir una nueva unidad aunque señalaron que la entrada en vigor del nuevo contrato “no va a ser inmediata” puesto que es preceptiva la previa salida del concurso de acreedores.

La misma fuente señaló que este nuevo contrato “tiene que ser parte del plan de viabilidad y, por consiguiente, de la salida del concurso de acreedores”.

Un contrato de 80 millones

En estos momentos, los responsables de Vulcano calculan que la salida del astillero de la situación concursal se podría producir en un plazo de 5 o 6 meses, lo que permitiría abordar la nueva construcción que tiene un presupuesto de 80 millones de euros sin contar con los equipos de prospección que llevaría a bordo y que elevaría su precio por encima de los 120 millones de euros.

“La decisión de Rieber de construir un nuevo sísmico es firme. La naviera tiene trabajo para su flota y necesita más unidades”, señala la fuente de Vulcano.

La nueva apuesta de Rieber por Vulcano es otro balón de oxígeno más al astillero de Teis que se puede ver plasmado en un compromiso de construcción mañana con la visita de Hans Petter Amundsen Klohs.

El astillero vigués explicará al presidente de Rieber las circunstancias del concurso de acreedores y la marcha de la construcción del sísmico 533 cuya finalización se espera para el otoño del próximo año.

Si finalmente se cierra el contrato, como se espera desde la dirección de Vulcano, el 535 será el segundo gran buque petrolífero contratado por los astilleros vigueses en lo que va de año después del off-shore multipropósito conseguido por MetalShips.

Vulcano confía en que el acuerdo se materialice ya que la compañía privada GC Rieber se dedica a inversiones a largo plazo en un selecto núcleo de actividades como la industria, la propiedad inmobiliaria y la navegación. Los barcos off-shore de Rieber son arrendados a las grandes compañías petrolíferas para realizar prospecciones y auxiliar a las plataformas de extracción de crudo.

Su actividad, iniciada en 1879, ha sido capitaneada por cuatro generaciones de una misma familia. Entre sus objetivos están la adquisición y ventas de empresas. La sede central de la sociedad está en la ciudad noruega de Bergen.